<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, reclamó ayer la liberación de los manifestantes “arbitrariamente encarcelados” durante las protestas en Bielorrusia tras las elecciones presidenciales del pasado día 9, que dieron como vencedor, por sexta vez consecutiva, a Alexander Lukashenko, bajo sospechas de fraude.</strong></h4> Sánchez hizo estas afirmaciones durante su intervención en el Consejo Europeo extraordinario celebrado por videoconferencia para analizar la situación de la ex república soviética, que vive continuas protestas en las calles de Minsk y en otras grandes ciudades. Las manifestaciones han sido duramente reprimidas por las fuerzas de seguridad, a conciencia de lo cual, tres personas han muerto y se han producido cientos de detenciones. El jefe del Ejecutivo expresó su “enorme preocupación” por la situación, pidió la liberación de los presos y reclamó “un diálogo nacional inclusivo”. Además, apoyó las demandas de democratización de la ciudadanía e hizo un llamamiento al fin del cese de la violencia. Según una nota del Palacio de la Moncloa, Sánchez reiteró el "compromiso y solidaridad" de España con el conjunto de la sociedad civil bielorrusa y su protesta ante unas elecciones que "no han sido libres ni justas". Tras indicar que el Gobierno apoya la adopción por parte de la Unión Europea (UE) de medidas "restrictivas individuales" contra los responsables de "esa violencia y los arrestos injustificados", señaló que España considera importante que las relaciones entre la UE y Bielorrusia se mantengan en el marco de la Asociación Oriental, que engloba a seis países de Europa del Este y con la que Bruselas se ha acercado a Minsk durante los últimos años. <strong>Sanciones europeas</strong> Al término de la cumbre comunitaria, el<strong> presidente del Consejo Europeo, Charles Michel</strong>, anunció que los líderes de la UE no aceptan el resultado de los comicios en Bielorrusia y que apoyan las movilizaciones en favor de la democracia. "Expresamos un mensaje claro, la UE es solidaria con el pueblo de Bielorrusia y no aceptamos la impunidad”, dijo. Asimismo, señaló que procederán a sancionar a un "número importante" de responsables de la represión violenta de las protestas en Bielorrusia y que la UE está dispuesta a acompañar una transición democrática en el país, empezando por el inicio de un diálogo interno. Por su parte <strong>la presidenta de la Comisión, Ursula von der Leyen,</strong> aseguró que el Ejecutivo europeo redirigirá la ayuda al desarrollo para sortear a Minsk y garantizar que llega a la sociedad civil y los grupos más vulnerables. Así, anunció <strong>53 millones de euros adicionales en ayudas</strong>, de los cuales dos millones irán directamente a las víctimas de la represión y dos para apoyar a los medios de comunicación y la sociedad civil en Bielorrusia. El grueso se destinará a la lucha contra el coronavirus, fortaleciendo servicios sociales y hospitales.