<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>La irrupción del COVID-19 no parece que vaya a generar “un cambio fundamental en las relaciones bilaterales entre España y EEUU” pero sí va a contribuir a deteriorar la imagen de Donald Trump en nuestro país</strong><strong>.</strong></h4> Estas son algunas de las conclusiones del informe <strong><a href="http://www.realinstitutoelcano.org/wps/portal/rielcano_es/publicacion?WCM_GLOBAL_CONTEXT=/elcano/elcano_es/publicaciones/informe-elcano-27-relaciones-espana-estados-unidos" target="_blank" rel="noopener noreferrer"><em>Relaciones España-Estados Unidos</em></a> del Real Instituto Elcano (RIE)</strong>, que fue presentado el pasado jueves en una videoconferencia en la que participaron el presidente del <em>Think Tank,</em> Emilio Lamo de Espinosa; el director y co-autor del informe, Charles Powell; el presidente de la Cámara de Comercio de EEUU en España, Jaime Malet; los investigadores del RIE Carlota García Encina (co-autora del informe) y Sebastián Royo y el investigador y director de la oficina del Real Instituto Elcano en Bruselas, Luis Simón. De acuerdo con el documento, <strong>“incluso antes del estallido de la pandemia provocada por el COVID-19, las relaciones bilaterales ya atravesaban un momento delicado”</strong>, especialmente porque “la Administración Trump nunca vio con buenos ojos la creación de un gobierno de coalición en enero de 2020 con la participación de Podemos” y porque el Gobierno español ya había manifestado su preocupación por las consecuencias económicas de los aranceles impuestos por Estados Unidos. En principio, según el informe, <strong>no parece probable que la irrupción del COVID-19 y sus aún inciertas consecuencias den lugar a un cambio fundamental en las relaciones bilaterales entre España y EEUU</strong>. En el terreno político, la principal consecuencia de la pandemia fue la cancelación de la visita de Estado de los Reyes de España a EEUU, prevista para abril de 2020. El secretario de Estado de EEUU, Mike Pompeo, y la ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, mantuvieron posteriormente conversaciones en las que reafirmaron la importancia de la relación bilateral y el deseo de celebrar la visita cuando la situación sanitaria de ambos países lo permitiera. En todo caso, señala el documento, <strong>la actuación de EEUU durante la crisis del COVID-19, “caracterizada por una absoluta falta de interés por liderar la respuesta internacional”</strong>, ha puesto de manifiesto, “una vez más, la indiferencia, cuando no hostilidad, de la Administración Trump hacia instituciones multilaterales como la Organización Mundial de la Salud y el G20”. Aparte, Washington “también aprovechó la pandemia para fomentar la rivalidad y la confrontación política y económica con China”. Estas circunstancias podrían tener algunas consecuencias en las relaciones entre Estados Unidos y España, ya que, “si bien <em>la diplomacia de la mascarilla</em> desplegada por China tuvo muy escaso impacto en España, cabe recordar que nuestro país tampoco recibió ningún apoyo sustantivo por parte de EEUU durante la crisis”. <strong>“El presidente Trump mencionó públicamente en varias ocasiones la intención de enviar material sanitario a España”, pero “esta oferta no se materializó” y, en cambio, “no se abstuvo de observar, en una rueda de prensa celebrada en abril, que España había sido ‘destrozada’ por el COVID-19”</strong>, recordó el Real Instituto Elcano. “Sin embargo, algunas empresas estadounidenses establecidas en España sí se solidarizaron con la sociedad española, invirtiendo recursos y transformando cadenas de producción para facilitar el suministro de un material sanitario precioso”, admitió. <strong>“La situación en la actualidad es delicada y por parte del Gobierno español hay una preocupación y hay un temor porque esta relación de cooperación bilateral pueda verse afectada”</strong>, declaró Carlota García Encina durante el acto. <strong>“La falta de interés de EEUU por liderar la respuesta internacional al COVID, junto a un entorno de incertidumbre, de debilitada relación transatlántica, de fuerte rivalidad y confrontación con China y de protestas raciales, han deteriorado la imagen de EEUU en España”</strong>, añadió. El documento admite que, “a corto plazo”, el futuro de la relación bilateral, y de las relaciones transatlánticas en su conjunto, “dependerá en no poca medida del resultado de las elecciones presidenciales estadounidenses de noviembre de 2020”. “Todo hace pensar que un segundo mandato del presidente Trump sometería la relación bilateral a nuevas tensiones, con consecuencias no siempre fáciles de prever, aunque mucho dependerá de lo que ocurra en el contexto más amplio de los vínculos entre EEUU y la UE”, prosigue. No obstante, advierte, “dados los cambios experimentados en el seno de la sociedad estadounidense durante estos años, sería ingenuo pensar que un cambio en el color político de la Administración elegida, que sin duda sería visto con buenos ojos por una mayoría de españoles, permitiría regresar automáticamente a las certidumbres de épocas pasadas”. “Con un presidente demócrata va ser más fácil hablar con ellos, pero no creo que sea una vuelta al Estados Unidos de antes”, añadió García Encina. Al respecto, Powell vaticinó al final del acto que Trump va a perder el voto popular en las elecciones de noviembre pero va a seguir en la Presidencia gracias a su victoria en el colegio electoral.