<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>Tal como se esperaba, el Consejo Europeo de ayer fue incapaz de llega a ningún acuerdo sobre el plan de recuperación económica tras la pandemia del COVID-19 y se comprometió a seguir negociando a mediados del próximo mes de julio en Bruselas.</strong></h4> El de ayer fue el primer debate entre los 27 jefes de Estado y de Gobierno sobre los detalles de fondo de <strong>la propuesta de la Comisión Europea, <em>Next Generation EU</em></strong>, que incluye un paquete dotado con 750.000 millones de euros, de los que 500.000 millones se destinarán a transferencias y 250.000 millones a créditos. El pasado martes, <strong>el secretario de Estado para la UE,</strong> <strong>Juan González-Barba</strong>, advirtió en el Congreso de los Diputados de que este encuentro sólo serviría como “primera toma de contacto” y aseguró que los próximos Consejos van a ser esenciales y que ya se había programado un Consejo presencial dedicado a esta materia para principios de julio, probablemente los días 9 y 10. El propio <strong>presidente del Consejo europeo, Charles Michel</strong>, reconoció en su carta de invitación enviada a los líderes que era imposible alcanzar un acuerdo este viernes. Durante su intervención, <strong>el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez</strong>, reclamó ayer que el acuerdo sobre el Fondo de Recuperación esté en vigor el 1 de enero de 2021 porque, “cuanto más tiempo perdamos, más profunda será la recesión”. Asimismo, instó a los Estados miembros a superar sus diferencias y “tratar de encontrar un terreno común que envíe una señal en la misma dirección”, y recordó que “lo que está en juego aquí es el futuro del proyecto europeo. Sin un acuerdo todos perderemos”. Sánchez reclamó también que el Fondo de Recuperación esté ligado al Marco Financiero Plurianiual (MFP) 2021- 2027, tal y como propone la Comisión Europea, y que se centre en los sectores y áreas geográficas más perjudicados por la pandemia de COVID-19. Aparte, el jefe del Ejecutivo expresó su confianza en que Charles Michel presente lo antes posible a los líderes un documento de negociación basado en la propuesta de la Comisión Europea, “cuyo contenido será discutido en un próximo CE con el objetivo de lograr un acuerdo a lo largo del mes de julio”, según Moncloa. En la citada comparecencia, González-Barba aseguró que el Gobierno espera con “cauto optimismo” las negociaciones sobre el Plan de Recuperación con vistas a que se alcance un “acuerdo político” sobre esta materia a finales de julio. En la reunión de ayer, todos los dirigentes europeos aceptaron los grandes principios del plan de recuperación, incluida la emisión de deuda por parte de la Comisión para su posterior transferencia a los Estados, pero discreparon en los detalles. España, Francia, Italia y Alemania y otros países creen que Bruselas debería inyectar al menos 750.000 millones y apoyan las transferencias directas frente a los préstamos. En el otro frente, los llamados países <em>frugales</em> (Países Bajos, Suecia, Austria, Dinamarca y Finlandia, los principales contribuyentes netos, salvo Alemania) piden un fondo inferior a los 750.000 millones y que el dinero se transfiera a los Estados a través de préstamos y no de subvenciones.