<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>El Gobierno español se adhirió ayer al llamamiento del secretario general de Naciones Unidas, António Guterres, en el que pidió “un alto el fuego mundial inmediato” para afrontar la lucha contra la pandemia del COVID19.</strong></h4> <strong>“Necesitamos poner fin al mal de la guerra y luchar contra la enfermedad que está devastando nuestro mundo”</strong>, declaró a través de su cuenta de Twitter <strong>la ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya</strong>, citando literalmente una parte del llamamiento de Guterres. “Nuestro mundo se enfrenta a un enemigo común: el COVID19”, declaró ayer el secretario general de la ONU durante una rueda de prensa telemática. <strong>“Este virus no entiende de nacionalidad o de etnia, facción o fe. Ataca a todos, sin tregua”</strong>, prosiguió. “Mientras tanto, los conflictos armados continúan en todo el mundo”, y los sectores más vulnerables –“las mujeres y los niños, las personas con discapacidad, las personas marginadas y desplazadas”- pagan “el precio más alto” y también son “quienes tienen un mayor riesgo de sufrir devastadoras pérdidas por el COVID19”. En su discurso, Guterres recordó que <strong>“en los países devastados por la guerra ha habido un colapso de los sistemas de salud”</strong> y que “los profesionales de la salud, ya escasos, han sido con frecuencia atacados” y advirtió de que los conflictos armados generan multitud de desplazados y refugiados que son “doblemente vulnerables”. <strong>“A las partes beligerantes les digo: Cesen las hostilidades. Dejen de lado la desconfianza y la animosidad. Silencien las armas; detengan la artillería; pongan fin a los ataques aéreos. Es crucial que lo hagan”</strong> para <strong>“ayudar a crear corredores humanitarios, abrir oportunidades de valor incalculable a la diplomacia y llevar esperanza a los lugares más vulnerables al COVID19”</strong>, prosiguió António Guterres. “La furia del virus ilustra la locura de la guerra. Por eso, <strong>hoy hago un llamamiento a un alto el fuego global inmediato en todos los rincones del mundo</strong>”, manifestó. “Es hora de poner en encierro los conflictos armados, suspenderlos y <strong>centrarnos juntos en la verdadera lucha de nuestras vidas</strong>”, añadió. “Necesitamos poner fin al mal de la guerra y luchar contra la enfermedad que está devastando nuestro mundo. Y esto empieza poniendo fin a los enfrentamientos en todas partes. Ahora. Eso es lo que la familia que somos la humanidad necesita, ahora más que nunca”, concluyó.