The Diplomat
El vicepresidente segundo del Gobierno, Pablo Iglesias, reconoció ayer en declaraciones a TVE que la postura de España respecto al Sáhara la marca el Ministerio de Asuntos Exteriores.
Iglesias trataba así de rebajar el nuevo choque entre los miembros del Gobierno de coalición después de que el secretario de Estado de Derechos Sociales, Nacho Álvarez, se reuniera con una delegación del Frente Polisario, y calificara en su cuenta de Twitter a Suelma Beiruk, que encabezaba el grupo como ministra saharaui de Asuntos Sociales y Promoción de la Mujer. Ello provocó la llamada del ministro de Asuntos Exteriores marroquí a su colega española, Arancha González Laya, y que esta tuviera que subrayar que la posición de España sobre el Sáhara no ha cambiado y que no reconoce a la República Árabe Saharaui Democrática (RASD).
El vicepresidente segundo insistió en sus declaraciones en que la reunión de Nacho Álvarez, fue con el Frente Polisario, que estuvo organizada por la ONCE y que tenía como objetivo tratar una colaboración con personas invidentes.