<h6 align="justify"><strong>Luis Ayllón</strong></h6> <h6 align="justify"></h6> <h4 align="justify"><strong><span class="s1">La ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, viajará el próximo miércoles a Argelia, en lo que será su primera toma de contacto con las autoridades de un país, cuya estabilidad es muy importante para España, que recibe de él más de la mitad del gas natural que consume.</span></strong></h4> <h4 align="justify"></h4> <p align="justify"><span class="s1">La visita de la ministra se produce después de que el pasado 24 de enero se desplazara a Marruecos, en su primer viaje oficial desde la llegada al cargo y que, inicialmente también incluía la visita a Argel. La etapa argelina se cayó oportunamente de la agenda de González Laya cuando alguno de sus asesores advirtió de que no resultaba muy conveniente unir en una misma gira la visita a los dos colosos del Magreb, tradicionalmente enfrentados entre sí.</span></p> <p align="justify"><span class="s1">Ahora, la ministra se dispone a realizar ese viaje con la intención de dejar claro que España quiere mantener una relación equilibrada con Marruecos y con Argelia, dos países con los que hay importantes intercambios comerciales con nuestro país.</span></p> <p align="justify"><span class="s1">En el caso de Argelia, España es su cuarto proveedor y es su segundo mayor cliente extranjero, fundamentalmente gracias a que importa del país magrebí más de la mitad del gas que consume. La presencia de empresas españolas del sector energético es muy importante y entre ellas están Repsol, Cepsa o Naturgy, que hace unos meses llegó a un acuerdo con la argelina Sonatrach para comprar el 42% de Medgaz a Cepsa, haciéndose con el control del gasoducto que une Argelia con Europa a través de España.</span></p> <p align="justify"><span class="s1">Además, unas 550 empresas argelinas cuentan con participación española a través de diversos modelos, como joint-ventures o transferencia de capacidades de producción. Y hay un gran interés en diversificar esa presencia a otros ámbitos como el agroalimentario o el agua.</span></p> <p align="justify"><span class="s1">En cualquier caso, la ministra lleva también entre los temas a tratar la decisión adoptada unilateralmente por Argelia en abril de 2018 de realizar un nuevo trazado de sus aguas territoriales en el Mediterráneo que alcanza la isla de Cabrera, a una decena de kilómetros de Mallorca.</span></p> <p align="justify"><span class="s1">González Laya ya afirmó la pasada semana que España ha mostrado su desacuerdo con ese trazado y que eso debe obligar a negociar a la otra parte, un planteamiento similar al adoptado con Marruecos, que también amplio sus aguas territoriales hasta alcanzar las de las Islas Canarias.</span></p> <p align="justify"><span class="s1">La jefa de la diplomacia española abordará estos asuntos con sus colega argelino, Sabri Boukadoum, y con el primer ministro, Abdelaziz Djerad, y será recibida en audiencia por el presidente, Abdelemejid Tebboun. Además, mantendrá un encuentro con una docena de empresarios españoles con intereses en Argelia y visitará el Instituto Cervantes.</span></p> <p align="justify"><span class="s1">En las conversaciones con las autoridades argelinas se podría tratar de buscar, según fuentes diplomáticas,una fecha para la celebración de una nueva Reunión de Alto Nivel entre España y Argelia, ya que la última tuvo lugar en abril de 2018 en Argel.</span></p> <p align="justify"><span class="s1">El Gobierno de Argelia, no obstante, tiene que hacer frente a las protestas que continúan produciéndose cada martes y cada viernes en sus calles desde que hace un año los argelinos, protagonizaran una multitudinaria manifestación -que dio lugar al movimiento ciudadano “Hirak”- y lograran evitar que Abdelaziz Bouteflika se presentara a un quinto mandato. Las elecciones presidenciales celebradas el pasado mes de diciembre y que dieron la victoria a Tebboun, miembro del aparato que domina en Argelia desde sus independencia, no han logrado frenar las protestas, ni siquiera cuando fue elegido un primer ministro sin vínculos con el círculo de Bouteflika, porque los manifestantes reclaman un cambio del sistema.</span></p> <p align="justify"></p>
