<h6><strong>Eduardo González</strong></h6> <h4><strong>El Gobierno de Guinea Ecuatorial se ha enredado en un nuevo conflicto diplomático con España después de que el embajador, Guillermo López Mac-Lellan, se implicara personalmente con sus colegas de Francia y Estados Unidos para impedir la detención, al parecer irregular, del ex presidente de la Corte Suprema Juan Carlos Ondo Angue, a quien el régimen de Teodoro Obiang Nguema investiga por supuesto golpe de Estado.</strong></h4> Los hechos sucedieron el pasado 11 de febrero, cuando un grupo de gendarmes acudió al domicilio de Ondo Angue (<strong>hijo de la hasta hace poco embajadora de Guinea Ecuatorial en España, Purificación Angue Ondo</strong>) con la intención de detenerlo. Fuentes diplomáticas españolas aseguraron a la agencia Efe que los agentes no llevaban ninguna orden de detención. Avisados de lo que estaba sucediendo, hacia las diez de la noche se presentaron en el lugar <strong>los embajadores de España, Guillermo López Mac-Lellan; Francia, Olivier Brocheni; y Estados Unidos, Susan N. Stevenson</strong>, quienes finalmente llegaron a un acuerdo con los gendarmes, aceptado por el propio interesado, por el cual el ex presidente de la Corte Suprema se presentaría voluntariamente al día siguiente para prestar declaración, acompañado por los tres embajadores. Ondo Angue, destituido como presidente de la Corte Suprema en agosto de 2018 a propuesta del Consejo Superior del Poder Judicial, iba a ser detenido en el marco de una investigación sobre un supuesto intento de golpe de Estado en diciembre de 2017. Al día siguiente de los hechos, <strong>el ministro de Asuntos Exteriores de Guinea Ecuatorial, Simeón Oyono Esono Angue</strong>, denunció la “injerencia” de los embajadores de España, Francia y Estados Unidos “en los asuntos internos de Guinea Ecuatorial” y advirtió de que la “interferencia” en “el proceso judicial interpuesto contra ciertos ciudadanos ecuatoguineanos (...) no contribuye a la mejora de las relaciones de amistad y de cooperación con los países amigos”. El <strong>Ministerio de Asuntos Exteriores español</strong> aseguró el pasado viernes que <strong>“los embajadores de España, Francia y Estados Unidos acudieron al domicilio del señor Angue a petición del mismo”</strong> y el ministro francés de Asuntos Exteriores, <strong>Jean-Yves Le Drian</strong>, afirmó en una rueda de prensa que “nunca ha sido intención del embajador francés impedir acciones judiciales”. Fuentes del Ministerio galo manifestaron a AFP, en la misma línea del Gobierno español, la visita se llevó a cabo “por invitación” del ex presidente de la Corte Suprema. En abril de 2019, Guillermo López Mac-Lellan se vio envuelto en otro incidente diplomático después de recibir en el Aeropuerto Internacional de Malabo al secretario general de la formación ecuatoguineana Convergencia para la Democracia Social (CPDS), Andrés Esono Ondo. Esono había sido detenido y posteriormente liberado en Chad por participar en un acto de la oposición de este país. El régimen de Obiang le había acusado de adquirir “armas, municiones y terroristas para cometer un golpe de Estado en la República de Guinea Ecuatorial con financiación extranjera”. Posteriormente, el Gobierno español expresó su “preocupación” por la detención de Esono Ondo , lo cual fue calificado por el régimen de Malabo como una “injerencia inaceptable” . En 1993, el Gobierno de Guinea Ecuatorial declaró persona non grata al entonces cónsul español en Bata, Diego Sánchez Bustamante, por “injerencia en los asuntos internos de Guinea Ecuatorial”, después de reunirse con los partidos de la oposición que habían boicoteado las elecciones legislativas.
