<h6>The Diplomat</h6> <h4><strong>Las ministras de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, y Defensa, Margarita Robles, aseguraron ayer que España está dispuesta a participar en la nueva misión de la UE para el control del embargo de armas en Libia.</strong></h4> El Consejo de Asuntos Exteriores de la UE (CAE) aprobó ayer en Bruselas la creación de una nueva misión en el Mediterráneo oriental que tendrá como principal objetivo hacer cumplir el embargo de armas a Libia, aprobado por la reciente Conferencia de Berlín del pasado 19 de enero y endosado la semana pasada por el Consejo de Seguridad de la ONU. Aparte, esta misión incluirá, como tareas secundarias, la lucha contra el crimen organizado implicado en la migración ilegal y la formación de la guardia costera y la Armada libias. La misión, que todavía no ha recibido un nombre (sustituye a la anterior Operación <em>Sophia</em>) incluirá medios aéreos, marítimos y por satélite. Aparte, los ministros acordaron que se vigile atentamente el posible efecto llamada de esta misión en el flujo migratorio, lo cual podría conducir, en caso de necesidad, a la retirada de los medios marítimos. La Operación <em>Sophia</em> fue lanzada en 2015 para combatir el tráfico ilegal de inmigrantes en el Mediterráneo central. Tras las tensiones generadas por ciertos sectores que acusaron a la misión de alentar la trata de seres humanos, <em>Sophia</em> –que operaba sin barcos, sólo con aviones-fue reinventada ayer por el CAE con otra denominación y con la nueva misión principal de controlar el cumplimiento del embargo de armas a Libia, especialmente amenazado por la actuación de dos potencias como Turquía y Rusia. Ha sido uno de los debates más largos e intensos que recuerdo, pero el acuerdo muestra que, cuando hay voluntad política, se puede actuar”, declaró en rueda de prensa el Alto Representante de Política Exterior de la UE y ex ministro español de Asuntos Exteriores, <strong>Josep Borrell</strong>. Con esta nueva misión, “la UE quiere mostrar su liderazgo en el control de una situación que está en la frontera de Europa” y enviar “un mensaje muy claro, un efecto disuasorio, a aquellos que estén pensando en traficar con armas, para que se lo piensen dos veces”, declaró <strong>la ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya</strong>, en la rueda de prensa posterior al Consejo. <strong>“España participa en la misión que existe ahora y no veo ninguna razón para que España no siga participando en esta misma misión, en su versión nueva”</strong>, aseguró la ministra. “Lo importante para España es demostrar el compromiso, que no es nuevo sino que continúa, con la búsqueda de la seguridad y la estabilidad en el Mediterráneo”, declaró González Laya. Por su parte, <strong>Margarita Robles</strong> aseguró ayer, tras recibir a su homólogo portugués, João Cravinho, en la sede del Ministerio, que España seguirá apoyando la Operación <em>Sophia</em> o una similar “porque el tema de la seguridad en el Mediterráneo es esencial”. El pasado 10 de febrero, González Laya y su homólogo griego, Nikos Dendias, exigieron a <strong>Turquía </strong>que respete el embargo de armas en Libia, tras la decisión del Gobierno de Recep Tayyip Erdogan de reforzar su presencia militar en el país norteafricano para apoyar al gobierno de Acuerdo Nacional del primer ministro Fayez al-Sarraj, apoyado por Naciones Unidas. Aparte, <strong>Rusia</strong> también está enviando armas a la otra parte en conflicto, las fuerzas del general Jalifa Hafter, que operan desde el este del país. Turquía y Rusia son dos de las potencias firmantes del acuerdo de la Conferencia de Berlín.