<h6><strong>Eduardo González</strong></h6> <h4><strong>La ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, mantuvo ayer una conversación telefónica “muy cordial” con el secretario de Estado de Estados Unidos, Mike Pompeo, con quien se citó para verse personalmente dentro de una semana en Múnich.</strong></h4> <h4></h4> Según informaron fuentes del Ministerio a <em>The Diplomat</em>, <strong>la conversación telefónica se produjo “a petición de Pompeo” y sirvió para establecer una “primera toma de contacto”</strong>. Durante la conversación, que fue “muy cordial”, el secretario de Estado le aseguró que <strong>Estados Unidos “quiere seguir estrechando lazos con España”, por considerarlo “un país estratégico y amigo”. </strong>Asimismo, ambos jefes de la diplomacia expresaron su “deseo recíproco de estrechar relaciones” y <strong>acordaron verse personalmente los próximos 14 y 15 de febrero en la Conferencia de Seguridad de Múnich. </strong> Según las mismas fuentes, la ministra tiene previsto <strong>viajar posteriormente a Washington</strong>, pero aún no se ha decidido una fecha. Fuentes del Ministerio precisaron el jueves en Bruselas que <strong>González Laya viajará a Estados Unidos acompañada por la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto</strong>, lo que da a entender que este viaje de trabajo va a tener un marcado carácter comercial. De hecho, Estados Unidos y España mantienen <strong>varios contenciosos comerciales en la actualidad</strong>, como la imposición de aranceles a productos agroalimentarios europeos (incluidos españoles) en represalia por las ayudas europeas a Airbus, la imposición de unos aranceles del 35% a la aceituna negra española o incluso (aunque no sea estrictamente comercial) la decisión de Washington de prohibir la entrada del consejero delegado y vicepresidente de Meliá, Gabriel Escarrer, en aplicación de la Ley Helms-Burton. Pese a ello, estos problemas no fueron tratados el pasado 5 de febrero durante la reunión que mantuvieron, en el Palacio de Santa Cruz, Arancha González Laya y la ministra de Defensa, Margarita Robles, con el embajador de Estados Unidos en España, Duke Buchan. <strong>“Una relación entre España y Estados Unidos no comienza con reclamaciones, queremos que comience con diálogo”</strong>, aseguró ayer la ministra durante una rueda de prensa conjunta en Madrid con su homólogo italiano, Luigi Di Mayo. “Estados Unidos es un gran amigo de España”, prosiguió. <strong>“Hay cuestiones en las que ambos estamos de acuerdo y trabajamos juntos y otras en las que no estamos de acuerdo pero tenemos que trabajar juntos, como las medidas comerciales, que siempre intentaremos resolver mediante el diálogo y mucha diplomacia discreta, si podemos”</strong>, añadió. Asimismo, la ministra aseguro que “no ha habido cambios” en la política española hacia <strong>Venezuela</strong> y, por tanto, “no debería tener gran impacto en las relaciones con Estados Unidos”. La posición española, aseguró, es "bastante clara y bastante consistente" y pasa por "favorecer, fomentar, apoyar y, cuando es necesario, empujar a las partes para que encuentren una solución". “La solución tiene que ser entre las partes venezolanas”, concluyó.