<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>La ministra de Asuntos Exteriores, Arancha González Laya, viajó ayer a Las Palmas de Gran Canaria para reunirse con el presidente canario, Ángel Víctor Torres, e intentar tranquilizarle sobre la iniciativa de Marruecos de ampliar las aguas territoriales desde el Sáhara Occidental solapándose con las del archipiélago español.</strong></h4> Tras entrevistarse ayer en Rabat con Naser Bourita, ministro de Asuntos Exteriores de Marruecos, González Laya viajó a las islas para dar cuenta al Gobierno canario de lo hablado con las autoridades marroquíes sobre el proceso legislativo de delimitación de aguas puesto en marcha en el país magrebí. Según dijo la ministra, quiso transmitir al presidente canario "calma" y enviarle una "señal muy clara" porque -aseguró- en los temas que Canarias "tiene un interés fundamental", el Gobierno central "le va a prestar una atención, una transparencia y una gestión conjunta especial". González Laya indicó que la normativa "dice que cuando una zona marítima de un país se solapa con la zona marítima de otro país, lo que se hace es llegar a un acuerdo, a un consenso entre las dos partes de cómo va a hacerse la delimitación", sin embargo matizó que "no" se está en ese punto porque "no hay de momento un trazado de Marruecos de su zona marítima". La ministra garantizó a Ángel Víctor Torres que el Gobierno elevará una queja ante Naciones Unidas si Marruecos se atribuye aguas del archipiélago, pero señaló también al presidente canario que Naser Burita, le ha asegurado que "no habrá hechos consumados ni decisiones unilaterales", sino que Rabat quiere ejercer su derecho a delimitar sus aguas territoriales de acuerdo con las convenciones internacionales sobre el mar, de la misma manera que España lo hizo en su momento.