<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>El líder del PSOE y hasta ahora jefe del Ejecutivo en funciones, Pedro Sánchez, consiguió ayer ganar la investidura como presidente del Gobierno por primera vez después de unas elecciones generales, y lo hizo en segunda votación y con un estrechísimo margen de sólo dos votos. </strong></h4> Pedro Sánchez fue elegido por primer vez presidente del Gobierno en junio de 2018 tras ganar una moción de censura contra Mariano Rajoy. Las tres investiduras a que se había presentado hasta la fecha tras unas elecciones (la última, el pasado verano) le habían sido esquivas por culpa, precisamente, de su nuevo socio de Gobierno, Podemos. La votación de ayer en el Pleno del Congreso dio un resultado <strong>de 167 a favor</strong> (los 120 del PSOE, 35 de Unidas Podemos y confluencias, seis del PNV, tres de Más País-Equo-Compromís y tres de Teruel Existe, Nueva Canarias y Bloque Nacionalista Galego), <strong>165 en contra</strong> (88 del PP, 52 de Vox, 10 de Ciudadanos, ocho de Junts per Catalunya, dos de CUP, dos de Unión del Pueblo Navarro y tres de Foro Asturias, Partido Regionalista Cántabro y Coalición Canaria) y <strong>18 abstenciones</strong> (13 de Esquerra Republicana y cinco de EH Bildu). La <strong>abstención de los republicanos catalanes</strong> fue, de hecho, la parte más polémica de las negociaciones a que se vio obligado Pedro Sánchez tras las elecciones del 10 de noviembre, en los que los resultados no le fueron tan favorables como esperaba. Tras llegar a un sorprendente acuerdo de Gobierno con Unidas Podemos sólo 48 horas después de los comicios, el jefe del Ejecutivo en funciones y líder del PSOE se vio obligado a tragarse algunas de sus propias palabras sobre el independentismo catalán para conseguir la abstención de ERC, con la que llegó a un acuerdo para crear una mesa bilateral de diálogo entre los Gobiernos central y catalán para abordar el "conflicto político" catalán y a someter a consulta ciudadana las medidas que puedan acordarse en esta mesa. Por ese motivo, el debate de investidura –en el que, una vez más, la política exterior de España estuvo casi absolutamente ausente- estuvo presidido por el tema de Cataluña, con acusaciones a Sánchez por parte de PP, Vox y Ciudadanos de traición y de haberse vendido a ERC. <h5><strong>El nuevo Gobierno</strong></h5> Una vez superada la investidura con el margen de votos más estrecho desde la Transición (los dos anteriores fueron ganados también por el respectivo candidato socialista, José Luis Rodríguez Zapatero en 2008 con 169 votos a favor y 158 en contra, y Felipe González 1989 con 167 votos frente a 155), <strong>Pedro Sánchez deberá asumir la tarea de presidir el primer Gobierno de coalición desde la llegada de la democracia. </strong>El Rey firmó ayer el nombramiento de Sánchez, que prometerá hoy mismo su cargo a las once de la mañana en el Palacio de la Zarzuela, horas después de su publicación en el BOE. En cuanto al resto del Gabinete, fuentes socialistas han advertido de que no se conocerá su composición hasta la semana que viene. De momento, todo apunta a que el nuevo Ejecutivo será claramente más numeroso que los anteriores, con una veintena de carteras y tres vicepresidencias, que corresponderán a <strong>Carmen Calvo</strong> como vicepresidenta primera y ministra de Presidencia y Relaciones con las Cortes; el líder de Podemos, <strong>Pablo Iglesias</strong>, como vicepresidente de Derechos Sociales; y <strong class="mce">Nadia Calviño </strong>como vicepresidenta económica. Asimismo, se espera que continúen algunos de los pesos pesados de la anterior legislatura, además de Carmen Calvo y Nadia Calviño, como <strong>María Jesús Montero (posible portavoz), José Luis Ábalos, Fernando Grande-Marlaska y Margarita Robles</strong>. <strong>Pablo Iglesias</strong> controlará como vicepresidente a <em>sus</em> cuatro ministros, uno por confluencia y centrados sobre todo en las áreas sociales, pero dada la distribución prevista de las carteras (incluida la separación de Trabajo y Seguridad Social), existen ciertas dudas sobre sus verdaderas posibilidades presupuestarias. Según ha trascendido a los medios, estos ministros serán <strong>Irene Montero</strong> (Ministerio de Igualdad), <strong>Yolanda Díaz</strong> (Trabajo), <strong>Alberto Garzón</strong> (Consumo, el primer ministro del PCE desde la II República) y el sociólogo y economista <strong>Manuel Castells</strong> (Universidades). La actual portavoz adjunta del grupo parlamentario Unidas Podemos, Ione Belarra, será la secretaria de Estado de la Agenda 2030 y el ex jefe de Estado Mayor de la Defensa (Jemad) Julio Rodríguez, secretario general de Podemos en Madrid, será jefe de gabinete de Pablo Iglesias. Por otra parte, aún queda por ver quiénes serán los ministros de carteras de tanto peso como <strong>Defensa, Justicia</strong> (quien deberá asumir las consecuencias de la sentencia del <em>Procés</em>, incluida la reciente decisión del Tribunal de Justicia de la UE sobre la inmunidad del líder de ERC, Oriol Junqueras) y, por supuesto, <strong>Asuntos Exteriores</strong>. De momento, las quinielas siguen apostando fundamentalmente por dos personas: <strong>José Manuel Albares y Luis Planas</strong>. No obstante, también se ha hablado de Irene Lozano y de Cristina Gallach, e incluso se ha barajado la posibilidad de que continúe Margarita Robles, ministra en funciones de Defensa y encargada de Exteriores desde que Josep Borrell asumió el cargo de Alto Representante de la UE para la Política Exterior, pero esta opción parece poco probable.