<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> El Ministerio de Asuntos Exteriores ha adjudicado a una PYME de Madrid el suministro de <strong>las insignias de condecoraciones de las órdenes de Isabel la Católica y del Mérito Civil</strong> por un valor de casi 308.000 euros. Ambas órdenes dependen del Ministerio, cuyo titular ejerce el cargo de Gran Canciller. Según informó el BOE, la Junta de Contratación del Ministerio de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación ha adjudicado a una PYME domiciliada en Madrid el suministro de las insignias, por un valor de 307.934,00 euros. La <strong>Orden de Isabel la Católica</strong> fue instituida por el Rey Fernando VII el 14 de marzo de 1815, con la denominación de Real Orden Americana de Isabel la Católica, para premiar la lealtad y los méritos contraídos en favor de la prosperidad los territorios americanos. La Orden adoptó su nombre actual en 1847 y, de acuerdo con su último reglamento aprobado mediante Real Decreto en 1998, su objeto es “premiar aquellos comportamientos extraordinarios de carácter civil, realizados por personas españolas y extranjeras, que redunden en beneficio de la Nación o que contribuyan, de modo relevante, a favorecer las relaciones de amistad y cooperación de la Nación Española con el resto de la Comunidad Internacional”. El Rey es el Gran Maestre de la Orden de Isabel la Católica y todas las condecoraciones de esta Orden son conferidas en su nombre y los títulos correspondientes van autorizados con la estampilla de su firma. El ministro de Asuntos Exteriores es el Gran Canciller y a él corresponde elevar a la aprobación del Consejo de Ministros los proyectos de Reales Decretos de concesión de los grados de Collar y Gran Cruz y conceder, en nombre el Rey, los grados inferiores. Todos los títulos de las condecoraciones de la Orden deberán llevar su firma. Por otra parte, la <strong>Orden del Mérito Civil</strong> fue instituida por el Rey Alfonso XIII en 1926 para premiar “las virtudes cívicas de los funcionarios al servicio del Estado, así como los servicios extraordinarios de los ciudadanos españoles y extranjeros en el bien de la Nación”. Esta condecoración puede ser concedida, además, a personas de nacionalidad extranjera, siempre que hayan prestado servicios distinguidos a España o una notable colaboración en todos aquellos asuntos que redunden en beneficio de la nación. Al igual que la Orden de Isabel la Católica, el Rey es el Gran Maestre de la Orden del Mérito Civil y el ministro de Asuntos Exteriores es el Gran Canciller. El marco regulatorio de ambas Órdenes está recogido en los Reales Decretos 2395/1998 y 2396/1998, de 6 de noviembre.