<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>Políticos, investigadores, académicos, científicos, empresarios, escritores y agentes culturales de toda Iberoamérica abordaron la situación de los idiomas español y el portugués durante la primera Conferencia Internacional de las Lenguas Portuguesa y Española (CILPE2019), celebrada los pasados 21 y 22 de noviembre en la sede de la Fundación Gulbenkian en Lisboa. </strong></h4> “La conferencia ha sido un gran éxito”, declaró durante la ceremonia de clausura <strong>Mariano Jabonero</strong>, secretario general de la Organización de Estados Iberoamericanos para la Educación, la Ciencia y la Cultura (OEI), el organismo que impulsó la conferencia. “Ha confirmado las expectativas que la OEI había puesto en esta cita y refuerza el valor educativo, social y político del español y del portugués, pero también el del Programa Iberoamericano de Difusión de la Lengua Portuguesa de nuestra organización”, añadió. Según explicó el propio Jabonero durante la ceremonia de apertura, el objetivo de CIPE2019 era crear <strong>“un espacio de diálogo entre dos lenguas que comparten un origen común”</strong>, que “conviven en nuestra región con cientos de otras lenguas originarias, indígenas, de inmigración y de lenguas de signos” y que, en su conjunto, <strong>“hablan más de 800 millones de personas en cuatro continentes, con especial presencia en América, África y Europa”.</strong> Las lenguas española y portuguesa se encuentran entre las más habladas en el mundo. El español es la segunda lengua materna que más se habla en el mundo y el portugués es la segunda lengua materna con presencia en más continentes. Aparte, en 2016, la aportación de los países de lengua española al PIB mundial fue un 6,9% y los países de lengua portuguesa representan, actualmente, un 3,6% de la riqueza del planeta. La Conferencia ha contado con <strong>el patrocinio del presidente de Portugal, Marcelo Rebelo, y del Rey Felipe VI de España </strong>y ha recibido el apoyo de la Fundación Calouste Gulbenkian, la Comunidad de Países de Lengua Portuguesa (CPLP), el Instituto Camões, el Instituto Cervantes, el Instituto Internacional de la Lengua Portuguesa (IILP), la Secretaria General Iberoamericana (SEGIB) y de representantes de los Ministerios de Educación, Cultura, Ciencia y Relaciones Exteriores de los países de la región, en particular de Brasil, Portugal, España y México. Durante <strong>la primera jornada</strong> de la conferencia, los participantes reflexionaron sobre la necesidad de incrementar la producción científica y lingüística en español y portugués, la relevancia de la lengua y la cultura en los procesos de internacionalización de las empresas y la movilidad académica y el intercambio entre sistemas educativos. Asimismo, en <strong>la segunda y última jornada</strong>, especialistas relacionados con los dos idiomas procedentes de Iberoamérica y África analizaron la formación de los docentes y los proyectos bilingües en la región, como el proyecto escuelas de frontera de la OEI, y reflexionaron sobre el papel de las lenguas portuguesa y española en la sociedad digital, un ámbito en el que los dos idiomas presentan un gran crecimiento: el español es la tercera lengua más utilizada en internet y el portugués ocupa el quinto lugar. La conferencia de clausura corrió a cargo de Nélida Piñón, una escritora brasileña que se declara como una completa ciudadana iberoamericana: “Nací en Galicia, me marché a vivir a Brasil y estoy totalmente enamorada de las lenguas portuguesa y española”. La ceremonia de apertura contó con la participación de Francisco Ribeiro Telles, secretario ejecutivo de la CPLP; Rebeca Grynspan, secretaria general Iberoamericana; lla secretaria de Comunicación y Cultura del Ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil, Marcia Donner Abreu; y Tiago Brandão Rodrigues, ministro de Educación de Portugal. Aparte, en la ceremonia de clausura participó, junto a Jabonero, <strong>el ministro Asuntos Exteriores de Portugal, Augusto Santos Silva</strong>, quien declaró que “esta lengua, tan importante para nuestra proyección internacional, hace tiempo que dejó de ser nuestra y es un recurso que compartimos con otras naciones”.