<h6><strong>Eduardo González</strong></h6> <h4><strong>“Vamos a gobernar en minoría dentro de un Ejecutivo compartido con el PSOE, en el que nos encontraremos muchos límites y contradicciones, y en el que tendremos que ceder en muchas cosas”. Aunque el sentido de la carta remitida a la militancia por el líder de Podemos, Pablo Iglesias, es de momento muy abstracto, un análisis de los programas electorales de ambos partidos nos podría dar algunas pistas en lo que se refiere a la política exterior.</strong></h4> De entrada, las propuestas electorales de ambas formaciones no sólo muestran diferencias de lenguaje y contenido (mayores o menores, según de qué se trate) sino que, ocasiones, ni siquiera tocan los mismos temas. Por ejemplo, <strong><a href="https://www.psoe.es/media-content/2019/10/Ahora-progreso-programa-PSOE-10N-31102019.pdf" target="_blank" rel="noopener noreferrer">el programa del PSOE</a> se extiende bastante en sus propuestas sobre la UE</strong>, en las que aboga por una España más “activa, relevante e influyente en la Unión Europea” y defiende importantes cambios en el funcionamiento de la Unión, como la eliminación de la unanimidad para ciertas decisiones, el “avance a diferentes velocidades en el proceso de integración europea”, el impulso de “la dimensión política del proyecto europeo”, la ampliación de competencias para Europa o la creación de una Europa federal. En cambio, <a href="https://podemos.info/wp-content/uploads/2019/10/Podemos_programa_generales_10N.pdf" target="_blank" rel="noopener noreferrer"><strong>Podemos</strong> </a>(que se dio a conocer en unas elecciones europeas) apenas aporta propuestas específicas para la UE (reclama que “ningún acuerdo que desproteja a los y las españolas en el Reino Unido ante el <em>Brexit</em>" e incluye algunas propuestas económicas y sociales de ámbito europeo, pero poco más) y prefiere centrarse más en la ONU, proponiendo que España impulse “la democracia internacional” mediante “<strong>la democratización del Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas"</strong> y la creación de una Asamblea Parlamentaria en la ONU, "elegida democráticamente”. Las únicas menciones del PSOE a la ONU se refieren a la Agenda 2030. En el campo de la <strong>defensa y la seguridad</strong>, se aprecian algunas coincidencias, aunque con importantes matices por parte de Podemos. PSOE apoya “<strong>el progresivo desarrollo de una Unión Europea de la Defensa</strong>, que incluya la creación de un ejército europeo, partiendo de los primeros pasos ya dados mediante la Cooperación Estructurada Permanente (PESCO)”. Por su parte, Podemos defiende "el fortalecimiento de la cooperación europea y un <strong>desplazamiento progresivo del espacio atlántico (OTAN) al europeo (PCSD),</strong> evitando duplicidades y mejorando tanto las sinergias entre Estados miembros como la eficacia en conjunto". En este aspecto, las propuestas de la formación morada respecto a la OTAN han pasado de reclamar un referéndum vinculante sobre la salida de España (elecciones europeas de 201) a defender “una mayor autonomía estratégica tanto a Europa como a España en el seno de la OTAN” (comicios generales de junio de 2016) y el ya citado “desplazamiento progresivo” de las dos elecciones generales de 2019. En cuanto al resto de las regiones del mundo, el PSOE aboga por el reforzamiento de las relaciones entre la UE y los países de <strong>América Latina y el Caribe</strong> y por la conversión de África en una prioridad de la política exterior europea. En cambio, Podemos sólo es concreto en la defensa de <strong>“la libre determinación del pueblo saharaui</strong>”. <h5><strong>Migración, refugio y cooperación</strong></h5> En materia de <strong>migración y refugio</strong>, los dos posibles socios de gobierno mantienen bastantes coincidencias, aunque con importantes matices de contenido y lenguaje. PSOE afirma que es “<strong>urgente la formulación de una auténtica política europea de inmigración</strong>, así como la modificación del Sistema de Acogida e Integración de refugiados, para hacer efectivo el derecho internacional sobre asilo y la gestión de los flujos migratorios, respetando los derechos humanos”. Asimismo, aboga por trabajar con los países de origen y de tránsito, “para facilitar una inmigración ordenada, así como el desarrollo sostenible de dichos países” y se compromete a promover el cumplimiento de los Acuerdos de Marrakech”. Por su parte, Podemos pide que se establezcan “<strong>vías legales y seguras de entrada en España</strong>”, reclama que el Estado articule los mecanismos para “garantizar los derechos humanos, especialmente el derecho a la vida”, propone que se recupere “la posibilidad de solicitar asilo en embajadas y consulados de terceros países” y advierte, en su objetivo de conseguir “cero muertes en el Mediterráneo”,<strong> que se refuerce el Servicio de Salvamento Marítimo y se proteja “el trabajo de las ONG de rescate y salvamento en el Mediterráneo Central”, incluida la supresión de las prohibiciones de salida</strong>. En materia de <strong>Ayuda Oficial al Desarrollo (AOD),</strong> los dos partidos se comprometen a alcanzar el 0,5 % de la renta nacional bruta (RNB) en 2023, que es cuando debería concluir la actual legislatura, aunque Podemos incluye el compromiso de conseguir el 0,7% en 2027. Ambas formaciones proponen que el 10 % de la AOD se destine a ayuda humanitaria.