<h6><strong>Andreu Cornelles</strong></h6> <h4><strong>El Goethe-Institut, la embajada de Alemania y la Oficina Nacional Alemana de Turismo en Madrid organizaron el pasado miércoles una mesa redonda en la que participaron tres testigos directos de la caída del Muro de Berlín, 30 años después del suceso. La noche del 9 de noviembre de 1989 se escribiría uno de los episodios más importantes del siglo XX que cambiaría la vida de alemanes y europeos.</strong></h4> Si una persona tuvo un papel protagonista esa noche, esa fue Riccardo Ehrmann. Él era el corresponsal en Berlín de la agencia de noticias italiana ANSA, y la tarde del 9 de noviembre se dirigió al Centro Internacional de Prensa de Berlín Oriental ante la convocatoria de los medios realizada por el Politburó de la RDA. “La rueda de prensa estaba siendo aburrida como todas”, señaló en la sede del Goethe-Institut. “Schabowski, el secretario de información del SED, aunque había dicho muchas mentiras en anteriores ruedas de prensa, admitió en esa que habían cometido algunos errores”, declaró Riccardo Ehrmann. “Yo le pregunté si había cometido algún error anunciando una ley de viajes a Berlín Occidental que no cambiaba absolutamente nada.” Schabowski se quedó en shock, porque según señaló Ehrmann, “nadie se atrevía a desafiar a un miembro del Politburó de esa forma”. Después de unos segundos de silencio Schabowski dijo que no habían cometido ningún error en ese sentido, pero que “tenía algo importante que anunciar”. Según relató Ehrmann, “el folleto que en ese momento sacó Schabowski fue el anuncio de la caída del Muro”. Comunicó que los alemanes del este podían viajar libremente al oeste, a lo que Ehrmann preguntó, «¿sin pasaporte? Sí, sin pasaporte, solo con un documento de identidad», dijo Schabowski. En ese momento realizó la pregunta definitiva, «¿Cuándo entra en vigor?», volvió Ehrmann a insistir. “Schabowski se puso nervioso y dijo <em>«Ab sofort!»</em>, (De inmediato)”, continuó el periodista. “En ese momento me di cuenta de lo que estaba sucediendo, corrí a llamar a la redacción, pero en Roma pensaban que me había vuelto loco”, dijo el periodista. “Cuando salí la gente empezaba a agolparse alrededor del Muro, y al llegar a casa recibí una llamada”. El embajador de Italia le <a href="https://thediplomatinspain.com/2019/10/felipe-gonzalez-fui-uno-de-los-pocos-lideres-mundiales-que-llamaron-a-kohl-tras-la-caida-del-muro/" target="_blank" rel="noopener noreferrer">llamó</a> y le preguntó “qué diablos había hecho”. “No recuerdo que le contesté, pero hoy le diría que había hecho caer el Muro” bromeó Ehrmann. Después del testimonio del periodista italiano, llegó el turno para el catedrático en Ciencia Política Ignacio Sotelo, que trabajaba en la Universidad Libre de Berlín en 1989. “Aquel día me llamaron muchos medios españoles para entrar en directo”, señaló. Según Sotelo, “Gorbachov fue el factor que fundamentó la caída del Muro, intentó reestructurar el edificio comunista, pero este cayó; y además amenazó con una actuación militar soviética si desde la propia RDA se atacaba al pueblo alemán”. Asimismo, una por entonces joven periodista de la recién creada Telemadrid, Suzzanne Pfingsten, llegó a Berlín dos días después de la caída. Aseguró que, “aunque al llegar reinaba un desconcierto nada propio de un país como Alemania, el júbilo y la alegría rápidamente reemplazaron el miedo”. “La noticia dejó de estar en los despachos de los políticos para estar en los ciudadanos junto al muro”, concluyó Pfingsten. Por su parte, la directora de la Oficina Nacional Alemana de Turismo en Madrid, Ulrike Bohnet, destacó “el importante papel que juega el turismo para derribar muros, y como desde la reunificación las pernoctaciones y la elección de Alemania como destino turístico han aumentado”. Finalmente, el consejero de Cultura de la Embajada alemana, Christoph Dorschfeldt, describió sus recuerdos de niñez en Berlín con el muro de fondo. “Esa noche tuvo un fuerte significado simbólico, su caída fue el triunfo democrático”, concluyó.