<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>El ministro de Asuntos Exteriores en funciones, Josep Borrell, aseguró ayer que no veía “ningún problema” en el hecho de que los Reyes viajen a Cuba inmediatamente después de las elecciones generales del 10 de noviembre.</strong></h4> "No veo cuál es el problema. Al día siguiente de las elecciones, que yo sepa, ya no hay elecciones. Ya no hay debate político, ya hemos votado", declaró Borrell durante una entrevista concedida a la COPE. <strong>“El Rey no tiene ninguna misión concreta que ejercer el día después de las elecciones"</strong>, prosiguió. “Podría estar más preocupado si lo mandáramos el día antes de las elecciones, pero el día después no hay interferencia alguna con nada". Don Felipe y Doña Letizia saldrán hacia Cuba el 11 de noviembre y protagonizarán, a partir del 12 de noviembre, la primera visita de Estado de un monarca español a Cuba en toda la historia de la isla. El viaje de Estado, que se celebrará hasta el 14 de noviembre, se enmarca dentro los eventos conmemorativos del V Centenario de la fundación de la ciudad de La Habana. Al respecto, Borrell precisó que el motivo por el que ningún Gobierno español había organizado hasta ahora una visita de Estado de los Reyes a Cuba es porque “nunca antes” se habían conmemorado los 500 años de La Habana. “Eso ocurre cada quinientos años, en fecha determinada". <strong>“El que el día antes haya habido elecciones, no veo en qué entorpece, es un viaje muy importante para rememorar nuestra historia"</strong>, añadió el ministro en funciones, quien precisó que cuando se aceptó la invitación, cursada inicialmente por el anterior presidente, Raúl Castro, y reiterada por el actual, Miguel Díaz-Canel, nadie podía prever unas elecciones anticipadas. En todo caso, recordó, <strong>"todo el mundo ha pasado por Cuba: dos o tres Papas, un presidente de Estados Unidos, el presidente de la república francesa, los duques de Edimburgo, herederos de la corona británica"</strong>. Fuentes del Ministerio de Asuntos Exteriores precisaron la semana pasada que uno de los objetivos de este viaje es normalizar las relaciones bilaterales y poner fin a una “anomalía” de la Corona en comparación con el resto de países de la comunidad iberoamericana. Juan Carlos I visitó La Habana en noviembre de 1999 para asistir a la IX Cumbre Iberoamericana de Jefes de Estado y de Gobierno, pero la de Felipe VI va a ser la primera visita de Estado de un monarca español en la historia de Cuba. Aparte, Borrell recordó que los Reyes concluirán su visita de Estado en <strong>Santiago de Cuba</strong>, donde se rendirá homenaje a los soldados y marinos españoles que participaron y murieron en las dos últimas batalles de la guerra contra Estados Unidos en 1898. Concretamente, precisó, visitarán el Castillo del Morro, donde habrá un homenaje a "nuestros marinos muertos cuando la Armada americana hundió la armada del almirante Cervera", y la Loma de San Juan, donde reposan los 500 “soldados de infantería que murieron en combate con las tropas americanas".