<strong>The Diplomat</strong> <h4><strong>Las autoridades de España y Estados Unidos se muestran convencidas de que el comercio y las inversiones bilaterales aumentarán sensiblemente tras la firma del nuevo convenio para evitar la doble imposición y prevenir la evasión fiscal que tuvo lugar el pasado viernes en Madrid.</strong></h4> En un acto organizado por la <strong>Fundación Consejo España-Estados Unidos</strong>, en presencia de su presidente, <strong>Juan Lladó</strong>; el secretario de Estado de Asuntos Exteriores, <strong>Fernando Valenzuela</strong>, y el embajador estadounidense en Madrid, <strong>Duke Buchan</strong>, estamparon su firma en el Protocolo de Enmienda del Convenio anterior que data de 1990 y que en trata en vigor el próximo día 27 de noviembre. Se trata de un instrumento largamente esperado por los empresarios españoles y estadounidenses, tal y como puso de relieve la secretaria de Estado de Hacienda, <strong>Inés María Bardón,</strong> presente en el acto y que recordó que se culmina un proceso iniciado hace diez años y que permitirá "impulsar las inversiones en ambos sentidos" mediante un mejor trato fiscal a la inversión empresarial. Bardón agregó que la renovación del convenio permitirá además limitar usos abusivos, mejorar el control y reafirmar el compromiso de ambos países con el intercambio de información tributaria para evitar actuaciones ilícitas. Por su parte, Fernando Valenzuela expresó su confianza en que las inversiones bilaterales se verán favorecidas y recordó que Estados Unidos es el primer socio comercial extracomunitario de España y el primer inversor extranjero. El secretario de Estado indicó también que el convenio demuestra “la apuesta y confianza de las empresas de ambos mercados y su compromiso con la creación de empleo en España y en Estados Unidos". Tras agradecer a la Fundación Consejo España-Estados Unidos la labor de acercamiento que realiza entre los dos países, aseguró que España desea mantener e intensificar el alto nivel de relación con Estados Unidos y reforzar la confianza mutua desde la que afrontar los retos comunes. En su intervención, el embajador Duke Buchan, dijo que España y Estados Unidos son aliados, socios y amigos, e incluso “colegas”. Y, tras señalar que el convenio reducirá los impuestos que las empresas españolas y estadounidenses pagan, estimó que, en los primeros tres años, permitirá un intercambio de miles de millones entre los dos países y más puestos de trabajo". Al acto asistieron directivos de grandes compañías españolas con intereses en Estados Unidos. Según cálculos de la Cámara de Comercio de Estados Unidos en España, favorecerá al país como destino inversor de empresas estadounidenses en comparación con otros países que hasta ahora gozaban de mejores convenios; e impulsará la posición de las filiales en Estados Unidos de compañías españolas que competían con otros grupos extranjeros con un marco fiscal más favorable.