The Diplomat
El Gobierno español condenó ayer «enérgicamente» el ataque aéreo perpetrado el domingo en la ciudad libia de Murzuq, en el que murieron más de 40 personas, y reclamó que el Derecho Humanitario se respete en toda circunstancia». El ataque fue atribuido por las autoridades locales a las fuerzas del mariscal de campo Jalifa Haftar, leal al gobierno instaurado en el este de Libia.
En un comunicado del Ministerio de Asuntos Exteriores, España llama a que se depuren las «responsabilidades oportunas». Además, el Gobierno «reitera su compromiso con los esfuerzos del representante especial del Secretario General de Naciones Unidas, Ghasán Salamé, en la búsqueda de una solución política a la crisis que vive Libia, convencidos de que no hay solución militar» y apoya su propuesta de una «tregua humanitaria y reactivación del proceso político de diálogo».