<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>España y Gibraltar volvieron a discrepar abiertamente esta semana sobre conceptos como autodeterminación o integridad territorial durante la reunión del Comité Especial de Descolonización de Naciones Unidas.</strong></h4> Durante la sesión del llamado Comité de los 24, celebrada este pasado lunes en Nueva York, <strong>el embajador español en la ONU, Agustín Santos Maraver</strong>, aseguró que la eliminación del colonialismo, que es la “razón de ser” de este organismo, “todavía no ha sido completada” porque España “padece una situación colonial” en su propio territorio, concretamente en Gibraltar, a la que se añade “la ocupación ilegal y contraria al Derecho Internacional del istmo, de las aguas en torno a Gibraltar y del espacio aéreo suprayacente”. Asimismo, insistió en que, en el caso de Gibraltar, a diferencia de otros procesos de descolonización, rige <strong>“el principio de restitución de la integridad territorial española, amputada con la presencia de la colonia en territorio español”</strong>, un principio que forma parte de “la doctrina del propio Comité y de la Asamblea General de las Naciones Unidas”. <strong>“Esta circunstancia, reconocida por las Naciones Unidas desde 1965, hace claramente distinto el caso de Gibraltar del de otros territorios sometidos a descolonización, en los que suele aplicarse el principio de libre determinación de los pueblos”</strong>, añadió el representante español. Por su parte, <strong>el ministro principal de Gibraltar, Fabián Picardo</strong>, aseguró que seguirá “defendiendo el derecho de autodeterminación de Gibraltar y su integridad territorial” e incluso puso como antecedente la reciente opinión consultiva de la Corte Internacional de Justicia (CIJ) sobre la separación del Archipiélago de <strong>Chagos</strong> de Mauricio, que “deja muy claro que el derecho a la autodeterminación de los territorios no autónomos es fundamental y que nuestra integridad territorial no puede verse afectada durante el proceso de descolonización”. “España arguye que su integridad territorial está en peligro en la descolonización de Gibraltar, a pesar del hecho de que cedió Gibraltar ‘para siempre’ en 1713”, prosiguió. <strong>“Agradeceríamos que la CIJ emitiese una opinión consultiva al respecto”</strong>, porque “el futuro de nuestro país debe decidirse de forma libre y democrática por el pueblo de Gibraltar en el ejercicio de su derecho a la autodeterminación”, concluyó. Se da la circunstancia de que lo que realmente ha pedido la CIJ es la descolonización de Chagos no a través de la autodeterminación, sino mediante su restitución territorial a Mauricio. Chagos es, junto a Maldivas y Gibraltar, uno de los tres territorios de ultramar en poder del Reino Unido cuya soberanía reclaman otros países, concretamente Mauricio, Argentina y Gibraltar. El pasado mes de mayo, la Asamblea General reclamó a Londres (con el voto favorable de España y contrario del Reino Unido) que devuelva Chagos a Mauricio en un plazo de seis meses. La resolución recuerda a la aprobada por la Asamblea General en diciembre de 1968, que pedía al Reino Unido, como potencia administradora, que pusiese término a la situación colonial de Gibraltar antes de octubre de 1969.