<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>La Asociación Latinoamericana de Instituciones Financieras para el Desarrollo (ALIDE) concluyó ayer su 49 Asamblea General, que se celebró esta semana en la sede de Casa de América, con una <a href="http://www.alide.org.pe/wp-content/uploads/2019/05/Declaraci%C3%B3n-de-Madrid-2019-.pdf">Declaración de Madrid</a> en la que se destaca la importancia de las relaciones comerciales con Europa y entre los propios países de la región.</strong></h4> “Nos congratulamos de mantener una relación estratégica entre las instituciones financieras de desarrollo de América Latina y el Caribe con el resto del mundo, particularmente con Europa”, comienza la declaración de la Asamblea, organizada entre los días 20 y 22 de mayo con el apoyo del <strong>Instituto de Crédito Oficial (ICO).</strong> La ALIDE, con sede en Lima (Perú), es la comunidad de instituciones financieras de América Latina y el Caribe y su objetivo es contribuir al desarrollo económico y social de la región. Cuenta con miembros activos en más de veinte países de América Latina y el Caribe y en países como Alemania, Canadá, China, India, Portugal, Rusia y España, donde sus socios son el ICO, que es miembro adherente desde 1994, y Cofides que se asoció en 2014. “Asimismo, reafirmamos nuestro compromiso de seguir trabajando en objetivos comunes para el fortalecimiento de las relaciones de comercio, inversión y cooperación que permitan el desarrollo económico sostenido y sustentable de nuestros países”, prosigue la declaración de la Asamblea, que fue inaugurada el lunes por l<strong>a ministra de Industria, Comercio y Turismo en funciones, Reyes Maroto</strong>. Aparte, el <strong>Rey Felipe VI</strong> recibió el martes a una representación de la Asociación. La ALIDE reafirma también “su adhesión y decisión de trabajar para el logro de los <strong>Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS)”</strong> aprobados por la ONU “apoyando a nuestros ciudadanos, empresas y gobiernos”, desarrollando “programas y productos financieros y no financieros innovadores que se correspondan con las necesidades de la demanda” y facilitando “el acceso al financiamiento requerido por los actores económicos”. Los participantes se comprometen también a "prestar atención al surgimiento de nuevos mercados" para América Latina y el Caribe y a liderar la financiación de proyectos de medio ambiente en la región, al tiempo que apoyarán la internacionalización de las pequeñas y medianas empresas e impulsarán <strong>“el comercio con la Unión Europea e intrarregional de Latinoamérica, que apenas llega al 20%, considerando esta cifra un reto y una oportunidad para la región”.</strong> <strong>“Para los países de la Unión Europea y sus instituciones financieras, Latinoamérica y el Caribe constituyen una prioridad de su política comercial y financiera, al igual que para las empresas europeas que han demostrado estabilidad y vocación de permanencia y han sido un elemento importante para la creación de empleo, riqueza, y mejora de la competitividad de la región, con transferencia de conocimientos y tecnología”,</strong> añade la declaración, que expresa su “especial reconocimiento” al ICO y al reseto de instituciones que patrocinaron la Asamblea, entre ellas BID, BEI, CAF-Banco de Desarrollo de América Latina, Cofides, Iberia y AECID.