<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>Los Reyes entregaron ayer en la Universidad de Alcalá de Henares, en Madrid, el Premio Miguel de Cervantes 2018 a la escritora uruguaya Ida Vitale, en un acto que se convirtió en un encendido homenaje a una lengua “tan propia de América como de España”.</strong></h4> El acto tuvo lugar en el Paraninfo de la Universidad y contó con la presencia, entre otros, de la vicepresidenta del Gobierno, Carmen Calvo; del ministro de Cultura, José Guirao; y del presidente en funciones de la Comunidad de Madrid, Pedro Rollán. Ida Vitale nació en Montevideo en 1923. Poeta, ensayista, crítica literaria y representante de la poesía esencialista, fue discípula de José Bergamín en Uruguay y colaboró en Buenos Aires con Juan Ramón Jiménez y en México con Octavio Paz. Pertenece a la Generación del 45, junto a autores tan destacados como Juan Carlos Onetti o Mario Benedetti. En su <a href="http://www.casareal.es/ES/Actividades/Paginas/actividades_discursos_detalle.aspx?data=6113">discurso</a>, el Rey Felipe VI destacó la importancia de la lengua española, <strong>“tan propia de América como de España”</strong>. “El afán de universalidad de nuestro idioma, en el que se expresan 577 millones de personas de distintos países y climas, separadas y al mismo tiempo unidas por vastos océanos o cordilleras, anula las diferencias”, prosiguió. “<strong>Esa universalidad nos acoge como miembros de una gran familia</strong> y se manifiesta en toda su plenitud en la lengua literaria desde hace siglos, en la fraternidad de los diversos y cambiantes estilos que vinculan a Juana Inés de la Cruz o Teresa de Jesús con Gabriela Mistral o María Zambrano, y a ellas con sus lectores pretéritos, presentes y, sobre todo, futuros”, afirmó el Rey. Según el monarca, la “cultura de culturas desplegada en este idioma” vive <strong>“un auge sin precedentes”</strong> desde hace décadas, lo cual <strong>“augura que el creciente interés y entusiasmo de otras naciones por hacerlo suyo consolidará al español como la segunda lengua de comunicación internacional </strong>gracias al esfuerzo conjunto de numerosas instituciones que velan por una difusión enaltecida con las virtudes de sus hombres y mujeres de letras”. “Su continuo enriquecimiento desde su origen en la Península hace un milenio, y la nueva savia que la nutre en las fértiles tierras americanas desde hace siglos, nos identifica en su asombrosa multiplicidad y apertura”, declaró Felipe VI, quien destacó también el auge del idioma en <strong>Estados Unidos, “donde se estudia, se aprende y es vínculo actual de comunicación familiar y profesional de millones de personas”.</strong>