<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>El comisario por la Acción por el Clima y la Energía, Miguel Arias Cañete, aseguró ayer en Madrid que la Comisión Europea está estudiando la posible competencia desleal de Marruecos por la venta a España de electricidad producida en plantas de carbón no sometidas a las normas comunitarias.</strong></h4> El pasado mes de febrero, la ministra de Transición Ecológica, Teresa Ribera, informó a Arias Cañete de que Marruecos había empezado a vender electricidad a España procedente de dos plantas eléctricas de carbón no sometidas a las normas europeas de emisión de CO2. España pasó de exportadora neta a importadora neta de energía con Marruecos precisamente a finales del año pasado, coincidiendo con la entrada en funcionamiento de las dos plantas. Dado que el canon que tienen que pagar las empresas europeas (y, por tanto, las españolas) por emitir CO2 es la principal causa de la subida de los precios de la electricidad en la UE, las nuevas plantas permiten a Marruecos vender electricidad más barata, lo cual, a juicio del Gobierno español, supone un caso claro de <strong>competencia desleal.</strong> En la carta, Ribera pedía al comisario que Bruselas se pronunciara sobre este tema y que se arbitrase "algún mecanismo" que permitiese, al mismo tiempo, preservar la libre competencia y proteger el medio ambiente. En declaraciones a la prensa tras participar en la presentación de la décima edición de la colección <em>Cuadernos de Derecho para Ingenieros</em>, organizada por Iberdrola y la Asociación/Colegio Nacional de Ingenieros del ICAI en la Universidad de Comillas en Madrid, Arias Cañete aseguró ayer que la Comisión está en “un proceso de reflexión" sobre este asunto y que la ministra de Transición Ecológica recibirá una respuesta pronto. Asimismo, precisó que este problema no preocupa sólo al Gobierno español, sino a <strong>“otros países europeos” </strong>fronterizos con “terceros países en los cuales la generación de energía no tiene las características que tiene en la Unión Europea" y que, por tanto, "han planteado preocupaciones similares".