<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>El ministro de Asuntos Exteriores, Josep Borrell, rechazó ayer cualquier acción violenta en Venezuela y exigió respeto a la integridad física y a la libertad del presidente encargado del país, Juan Guaidó, hostigado el martes por militantes “chavistas” cuando salía de la Asamblea Nacional, junto a varios diputados.</strong></h4> El vehículo de Guaidó fue interceptado por varias personas que le arrojaron objetos contundentes. Ayer su esposa, Fabiana Romero, fue recibida en la Casa Blanca por el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ante quien alertó sobre posibles atentados contra su marido. El jefe de la diplomacia española señaló ayer en su cuenta de Twitter: "España reitera su rechazo a cualquier acción violenta, exige respeto a la integridad física y a la libertad del presidente encargado e insiste en la necesidad de que se respeten las competencias de la Asamblea Nacional de Venezuela y el fuero de sus integrantes y de que se permita el libre ejercicio de la labor de los profesionales de los medios de comunicación". Borrell participará hoy en Quito, junto al secretario de Estado de Cooperación Internacional y para Iberoamérica y el Caribe, Juan Pablo de Laiglesia, en la segunda reunión del Grupo Internacional de Contacto sobre Venezuela, del que forman parte la Unión Europea y varios países iberoamericanos, y que trata de encontrar una salida a la crisis venezolana. España defenderá la posición de la UE de intentar de involucrar a Naciones Unidas en la búsqueda de una solución al conflicto, una solución que, según algunas fuentes, podría pasar por intentar llegar a un acuerdo para la convocatoria de unas elecciones presidenciales con garantías -una vez formados unos órganos electorales independientes-, y a las que pudiera concurrir también Nicolás Maduro. Del Grupo de Contacto, que parece la iniciativa externa que cuenta ahora con más margen de maniobra ante el régimen bolivariano y la oposición, forman parte la UE, con la Alta Representante de Política Exterior, Federica Mogherini, al frente; ocho Estados miembros (España, Portugal, Francia, Alemania, Reino Unido, Italia, Suecia y Holanda) y tres países iberoamericanos (Costa Rica, Ecuador y Uruguay). Sin embargo, el Parlamento Europeo puede aprobar hoy una resolución pactada por los grupos del Partido Popular Europeo, Conservadores y Reformistas y el liberal ALDE para reforzar las sanciones contra el Gobierno de Maduro e impedir que éste utilice el Grupo de Contacto Internacional para mantenerse en el poder.