<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>El anuncio hecho ayer por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de que las elecciones generales serán el 28 de abril marca el comienzo de lo que sera un maratón electoral en España, ya que, un mes más tarde, el 26 de mayo, se celebrarán los comicios al Parlamento Europeo y las elecciones municipales y autonómicas.</strong></h4> Después de que el Congreso de los Diputados tumbara su proyecto de Presupuestos Generales del Estado, Pedro Sánchez se ha visto obligado a poner fecha a las elecciones generales, cumpliendo así lo que venían reclamándole los partidos de la oposición desde que hace ocho meses accedió a La Moncloa, tras una moción de censura al entonces presidente del Gobierno, Mariano Rajoy. El calendario electoral se abrirá formalmente el 5 de marzo con un Real Decreto de convocatoria de elecciones y disolución de las Cortes. La campaña para las elecciones generales se abrirá el 12 de abril y se desarrollará, en gran parte, durante la Semana Santa (del 14 al 21 de abril), en que muchos españoles están de vacaciones. El cierre de campaña será el día 26, la jornada de reflexión el 27 y las votaciones el 28. Se calcula que, una vez proclamados oficialmente los resultados y expedidas las credenciales a los nuevos diputados y senadores, las Cortes podrían constituirse entre el 15 y el 23 de mayo, es decir, en plena campaña de las elecciones autonómicas, municipales y europeas, que habrá dado comienzo el 10 de mayo. A partir de la constitución del Parlamento, el Rey comenzará la ronda de consultas con los partidos que hayan obtenido representación parlamentaria, con vistas a la designación de un candidato a formar un nuevo Gobierno, algo que no será, previsiblemente, una tarea fácil. La presidencia de Pedro Sánchez ha sido la más corta desde la reinstauración de la democracia en España, pero el líder socialista aspira a poder seguir gobernando, aunque, para ello necesitará establecer alianzas con otras formaciones, según los sondeos. Estos señalan, en términos generales, que el PSOE puede ser el partido más votado, seguido del PP y de Ciudadanos, con Podemos como cuarta fuerza política y con la irrupción de la derecha radical de Vox, a quien algunas encuestas llegan a dar el 10 por ciento de los votos. Todo dependerá, en cualquier caso, en cómo se traduzcan los resultados en escaños, para poder alcanzar los 176 diputados necesarios para poder gobernar. Al PSOE le sería muy difícil llegar a hacerlo sólo con el apoyo de Podemos, y tendría que intentar reeditar un acuerdo en el que tenga el respaldo de los nacionalistas e independentistas vascos y catalanes. Aunque los socialistas confían aún en gobernar en una posible alianza con Ciudadanos, la formación naranja parece inclinarse más a un acuerdo con el PP, con el apoyo de Vox, similar al alcanzado para gobernar en Andalucía.