<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> <h4><strong>El embajador de España en Venezuela, Jesús Silva, aseguró ayer que la Embajada mantiene la interlocución tanto con el Gobierno de Nicolás Maduro como con la oposición, porque es su “obligación”.</strong></h4> “La colectividad española”, formada más de 200.000 personas, “está tranquila, pero con calma tensa y con mucha expectación”, aseguró Silva en declaraciones a <a href="http://www.rtve.es/alacarta/audios/las-mananas-de-rne-con-inigo-alfonso/mananas-rne-inigo-alfonso-jesus-silva-embajador-espana-venezuela-vivimos-calma-tensa/4954700/"><strong>Radio Nacional de España</strong></a>, recogidas por <em>The Diplomat</em>. Según Silva, la representación española en Caracas mantiene la interlocución “con todo el mundo” porque, <strong>“lógicamente, una Embajada está para tener interlocución”</strong>. “España forma parte de la comunidad iberoamericana y <strong>la Embajada y el embajador tienen la obligación de estar en contacto con todos los sectores de la sociedad, ya sean el Gobierno, la oposición, las patronales o los sindicatos"</strong> porque es <strong>"la única forma de poder coger el pulso del país y saber lo que sucede”</strong>, prosiguió. Respecto a la posibilidad de que el Gobierno de Venezuela ordene el cierre de la Embajada de España y la expulsión del personal diplomático, Jesús Silva advirtió de que “España tiene un papel y una obligación que cumplir con Venezuela" y, por tanto, <strong>“la presencia de la Embajada es necesaria, no sólo por una cuestión de relación política con Venezuela sino, sobre todo, por una cuestión de atención a los ciudadanos españoles".</strong> Según el embajador, <strong>España "siempre" ha intentado desempeñar "una función constructiva, de tender puentes, de intentar ayudar a ambas partes a entenderse"</strong> en Venezuela. “Ésa sigue siendo nuestra vocación y nuestra misión y todo lo que sea apartarse de eso, evidentemente, sería negativo no sólo para España y sus intereses, sino para Venezuela, el Gobierno venezolano y la propia oposición”, agregó. En cuanto a las posibles soluciones a la crisis de Venezuela, Silva aseguró que, <strong>“hasta ahora, la UE y España como parte de la UE” han defendido, “desde el primer momento”, que “la única salida deseable, posible y conveniente es una salida negociada, pacífica y democrática”</strong> y, en este sentido, España tiene “la esperanza de que pueda haber un juego democrático libre que permita, entre otras cosas, una posibilidad de alternancia". <strong>"Al final son los venezolanos quienes tienen que decidir cuál es su futuro, cómo se quieren gobernar y por quién quieren ser gobernados"</strong>, advirtió. Jesús Silva vivió muy personalmente uno de los momentos más tensos en las relaciones diplomáticas entre España y Venezuela, cuando <strong>fue expulsado a finales de enero de 2018 por el régimen de Maduro en represalia por las “continuas agresiones y recurrentes actos de injerencia” en los asuntos venezolanos</strong>. Madrid respondió con la expulsión del embajador venezolano, Mario Isea, de acuerdo con el “principio de reciprocidad”. Finalmente, <strong>los dos Gobiernos llegaron a un acuerdo en abril para normalizar la relaciones diplomáticas</strong> “en beneficio de sus ciudadanos, que están unidos por estrechos vínculos que deben preservarse”, lo que permitió el regreso de los dos embajadores a sus respectivos destinos.
