<h6><strong>The Diplomat</strong></h6> El ministro de Asuntos Exteriores, Josep Borrell, ha optado por enviar una carta a su colega belga, Didier Reynders, para expresar la irritación del Gobierno de España por el <a href="https://thediplomatinspain.com/2018/12/belgica-vuelve-a-provocar-la-irritacion-de-espana-a-causa-del-contencioso-catalan/">apoyo dado por el ministro de Defensa de Bélgica</a>, el nacionalista flamenco Sander Loones a la huelga de hambre emprendida por algunos presos independentistas catalanes, según ha podido saber The Diplomat. Borrell dijo ayer en Bruselas que la protesta española se haría a través de "una comunicación diplomática normal y corriente", que, en esta ocasión, no se ha traducido en convocar al embajador belga en Madrid, Marc Calcoen, algo que ha ocurrido ya en tres ocasiones en los últimos tiempos, siempre con motivo de manifestaciones antiespañolas por parte de autoridades flamencas. Pese a que el Gobierno de Charles Michel siempre asegura que no comparte esas manifestaciones, la tensión en las relaciones entre España y Bélgica ha crecido de manera sensible, a lo que contribuye también la presencia en ese país del fugado ex presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, y varios de su consejeros.