<h6><strong>The Diplomat.</strong> 25/11/2018</h6> <h4><strong>España dará en el Consejo Europeo de este domingo su visto bueno al texto del Brexit, después de que en las últimas horas la UE y el Reino Unido aceptaran las demandas españolas de tener la última palabra en la futura relación de los Veintisiete con Gibraltar.</strong></h4> <strong> </strong> El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, compareció ante los periodistas, a primera hora de la tarde del sábado, para anunciar que <strong>asistirá a la reunión del Consejo Europeo</strong> que debe ratificar la salida británica de la Unión, después de haber obtenido <strong>garantías, “por escrito”</strong>, de que una <strong>nueva relación con Gibraltar queda excluida de la negociación general</strong> entre la Unión Europea y el Reino Unido, lo que da a España la posibilidad de negociar directamente con Londres cualquier tema relacionado con la colonia. Sánchez explicó que “la relación política, jurídica e incluso geográfica<strong> pasarán por España</strong>" y dijo que “el Consejo Europeo y la Comisión Europea descartan que el artículo 184 sea aplicable a la <strong>relación futura de Gibraltar con la UE, incluso en el ámbito territorial”</strong>, aspecto este que el jefe del Ejecutivo consideró que es “lo importante”. Los presidentes del Consejo Europeo, Donald Tusk, y de la Comisión, <strong>Jean Claude Juncker</strong>, remitieron una <strong>carta conjunta al presidente del Gobierno</strong> en la que señalan que comparten su punto de vista y reconocen que una nueva relación con Gibraltar queda excluida de la negociación general entre la Unión Europea y el Reino Unido. "Queda claro que la integridad territorial de España es un elemento esencial a preservar y a tener en cuenta por el Consejo Europeo y la Comisión Europea", afirmó Sánchez quien añadió que se <strong>“logra un triple blindaje histórico</strong> con el que podrá abordar con el Reino Unido el futuro de Gibraltar". Las exigencias por escrito las ha recibido también España del<strong> Reino Unido</strong>, cuyo embajador ante la Unión Europea, Tim Barrow, envió una <strong>carta al Consejo Europeo para dejar por escrito</strong> que el Tratado de Retirada de la UE "no impone ninguna obligación" de que la relación futura que deben aún negociar Londres y Bruselas se vaya a aplicar en Gibraltar. El texto recoge la exigencia de España en cuanto a la interpretación del acuerdo de divorcio, si bien se trata de un documento sin ningún valor jurídico, al contrario que el acuerdo del Brexit, que es legalmente vinculante. <p align="left">En esa línea, el ministro principal de Gibraltar, Fabian Picardo, consideró ayer que el acuerdo alcanzado no es más que "un trozo de papel" sin valor jurídico frente al pacto alcanzado entre Londres y Bruselas, que sí tiene peso legal. "Dejemos una cosa clara. Esas declaraciones no son suscritas por Reino Unido ni son vinculantes para Reino Unido en modo alguno”, dijo. Y añadió: “No son más que una posición política de los 27 Estados miembro restantes. Estas declaraciones políticas no tienen valor legal alguno".</p> <p align="left"></p> <p align="left">Por su parte, el presidente del PP, Pablo Casado, rechazó el acuerdo y acusó al Ejecutivo de haber "capitulado de su responsabilidad de defender la soberanía de España en el Peñón" con un "fracaso histórico", porque "el artículo 184 no ha sido modificado" y se ha renunciado a la capacidad de veto que se obtuvo en marzo pasado para cualquier cambio en la relación de Gibraltar con la UE.</p>