Susana Díaz durante una visita al astillero de Navantia en San Fernando./ Foto: Navantia
The Diplomat. 26/10/2018
El Parlamento Europeo aprobó ayer, por inmensa mayoría, una resolución en la que condena de manera contundente la tortura y el asesinato del periodista saudí Jamal Kashoggi en Turquía y se pide a “todos los Gobiernos de la UE” que acuerden un embargo de armas a Arabia Saudí. Los eurodiputados de PSOE, PP y Ciudadanos se abstuvieron en el párrafo referente al embargo de armas.
La resolución de la Eurocámara se produce inmediatamente después de que tanto el Gobierno como PSOE, PP y Ciudadanos optaran esta semana por no echar más leña al fuego en el debate sobre el posible embargo de armas a Arabia Saudí. El debate está fuertemente condicionado por la proximidad de las elecciones autonómicas en Andalucía, una comunidad que espera con ansiedad los 6.000 puestos de trabajo que debería generar el contrato de Navantia con Riad para la venta de cinco corbetas.
La Eurocámara, por 325 votos a favor, uno en contra y 19 abstenciones, exige una investigación internacional independiente sobre el asesinato de Kashoggi, un crimen que los eurodiputados consideran “improbable” que se ejecutara “sin el conocimiento o control del príncipe heredero saudí Mohammad bin Salman”.
Asimismo, el Parlamento Europeo pide de nuevo a “todos los Gobiernos de la UE” que acuerden un embargo de armas a Arabia Saudí a nivel comunitario, en la misma línea que la petición presentada el pasado 4 de octubre a causa del papel de Riad en la guerra de Yemen.
Los socialistas españoles votaron a favor de la resolución conjunta pero se abstuvieron en lo referente al embargo de armas por “coherencia con la posición manifestada por el presidente del Gobierno de España”, según informó la delegación en una nota de prensa. Lo mismo hicieron los eurodiputados de PP y Ciudadanos.
La resolución fue aprobada casi por unanimidad pero PSOE, PP y Cs se abstuvieron en el apartado del embargo
Los eurodiputados también instan a la Alta Representante de la UE para Política Exterior, Federica Mogherini, y a los Estados miembros a considerar la imposición de sanciones específicas a Arabia Saudí, incluidas la prohibición de visados o la congelación de activos a ciudadanos saudíes, y pide a los Estados miembros que en el próximo Consejo de Derechos Humanos de la ONU, que se celebrará el 5 de noviembre en Ginebra, se debata la posibilidad de expulsar a Riad de este organismo, al que pertenece actualmente España.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, aseguró este miércoles ante el pleno del Congreso de los Diputados que España condena “sin paliativos” el asesinato de Khashoggi, pero también advirtió de que la política es el arte de «convertir ideales en realidad» y de «conciliar intereses en ocasiones contrapuestos», y, por tanto, nuestro país seguirá vendiendo armas a Arabia Saudí «en defensa de los intereses de España” y de los trabajadores de la Bahía de Cádiz.
El día anterior, la Comisión de Defensa del Congreso de los Diputados rechazó una proposición de Compromís (Grupo Mixto) en la que se pedía un embargo de armas a Arabia Saudí. El resultado fue de nueve votos a favor (PDeCAT, ERC, Unidos Podemos y Compromís), 23 en contra (PSOE y PP) y tres abstenciones (Ciudadanos).
Entretanto, el tema de Arabia Saudí sigue escociendo en Andalucía, que celebrará elecciones autonómicas el próximo 2 de diciembre y en la que ningún partido quiere llevarse la medalla de haber contribuido a hundir los contratos de Navantia.
La presidenta de la Junta de Andalucía, Susana Díaz, declaró este martes que la defensa de los derechos humanos es “compatible” con la defensa del empleo y el presidente del PP-A y candidato a la Presidencia de la Junta, Juanma Moreno, aseguró que «nunca» pondrá «en peligro» los puestos de trabajo en Andalucía. La coalición Adelante Andalucía (que reúne a Podemos e IULV-CA) reclamó que el Gobierno asuma la carga de trabajo de Navantia cuando sea incompatible con los derechos humanos. El líder de Podemos, Pablo Iglesias, hizo una petición similar en la Cámara Baja.