Foto: Indra
The Diplomat. 15/10/2018
La multinacional española de tecnología y consultoría Indra se ha adjudicado un contrato en Australia para el diseño y desarrollo de un laboratorio forense desplegable que facilitará la recopilación rápida, el análisis y la documentación de evidencias sobre cualquier artefacto explosivo improvisado (IED).
La filial de Indra ha sido seleccionada por la Commonwealth para diseñar este sistema, que será empleado principalmente por el Ejército Australiano y que será suministrado por 36 millones de dólares australianos, unos 23 millones de euros, según informó la compañía.
Más del 90% del contrato se ejecutará directamente en Australia, trabajando en estrecha colaboración con fabricantes y distribuidores de equipos locales. Daronmont Technologies ha sido seleccionada como empresa local de Australia Meridional para fabricar el shelther según las estrictas especificaciones operacionales requeridas por la Commonwealth.
Con esta operación, el Ejército australiano contará con una tecnología de vanguardia superior en capacidad a la de otros sistemas de este tipo. Aparte, durante la ejecución del contrato, Indra llevará a cabo la transferencia tecnológica necesaria para asegurar que los sistemas se puedan mantener y sostener completamente y de forma independiente en Australia.
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La empresa suministrará un laboratorio forense desplegable de vanguardia por 23 millones de euros
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Con este fin, la compañía transferirá a las empresas locales la experiencia y conocimiento adquiridos con la entrega de este tipo de sistemas a clientes de todo el mundo, incluida la Agencia Europea de Defensa, y con la implantación de un laboratorio que prestó servicio en Afganistán entre 2011 y 2014.
Indra está presente en Australia desde 2007, con cerca de 140 empleados y oficinas en Sídney y Newcastle. La multinacional española es uno de los principales proveedores de radares y equipos de navegación aérea de Airservices Australia y primer suministrador mundial de los sistemas DVOR de ayuda a la navegación, que desarrolla y fabrica directamente en su planta de producción en Sídney. También cuenta con contratos en curso en Nueva Zelanda, Papúa Nueva Guinea y las islas del Pacífico.
