Vista general del Salón del Trono durante la intervención de Monseñor Renzo Fratini, Nuncio de Su Santidad./ Foto: Casa de SM el Rey
The Diplomat. 01/02/2018
El Rey Felipe VI aprovechó ayer la tradicional recepción al Cuerpo Diplomático acreditado en Madrid para agradecer a la comunidad internacional el apoyo “sin fisuras” a España ante lo que calificó de “la más grave crisis” que ha tenido que afrontar en su historia reciente, en clara alusión al desafío independentista en Cataluña.
Ante 95 embajadores, 17 encargados de negocio y 20 representantes de organismos internacionales, el Monarca, acompañado por la reina Letizia, se refirió en su discurso, sin citarla expresamente, a la crisis catalana, de la que dijo que “ha puesto a prueba valores y principios que son no solo españoles sino europeos y universales: el valor de la convivencia y la concordia en la diversidad y el valor del respeto a la democracia y al Estado de Derecho».
Antes de su intervención, como decano del Cuerpo Diplomático, el Nuncio de Su Santidad, monseñor Renzo Fratini, pronunció unas palabras en las que respaldo la unión de España y expresó en nombre de los embajadores, su complacencia al comprobar “el fortalecimiento de las instituciones, que garantizan en democracia las libertades y derechos de todos los españoles, avalando el papel que representa España en el concierto de las naciones”.
Asistieron a la recepción, celebrada en el Palacio Real, el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, y el ministro de Asuntos Exteriores, Alfonso Dastis, junto a los altos cargos del Ministerio. Ningún representante de Venezuela estuvo presente, después de que su embajador, Mario Isea, fuera expulsado hace escasos días. Tampoco hubo representación de Corea del Norte y Siria, cuyos representantes fueron igualmente expulsados hace más tiempo. Por primera vez asistieron a la ceremonia un buen número de nuevos embajadores, entre ellos los de Estados Unidos, Duke Buchan; y de Cuba, Gustavo Machín, que presentaron sus Cartas Credenciales el pasado día 18.
[hr style=»single»]
A la recepción no acudieron representantes de Venezuela ni Corea del Norte, tras la expulsión de los embajadores
[hr style=»single»]
Don Felipe hizo en su discurso un detallado repaso a los asuntos de interés para España en el ámbito internacional, entre ellos, la lucha contra el terrorismo, la no proliferación nuclear y la defensa de los Derechos Humanos, recordando que desde el 1 de enero nuestro país es miembro del Consejo de Derechos Humanos de Naciones Unidas.
Sobre el Brexit, dijo que España desea un acuerdo “lo más ambicioso posible” que permita a nuestras empresas y operadores económicos seguir trabajando con sus socios británicos y que garantice las mayores posibilidades de libertad de circulación y establecimiento de los ciudadanos, tanto europeos como británicos.
Al hablar de Estados Unidos, Don Felipe reiteró que Estados Unidos es un aliado esencial de España y uno de sus principales socios económicos. Y con respecto a Rusia, señaló que apuesta por «una relación constructiva» que permita «avanzar en la creación de un espacio euro-asiático basado en la confianza y el respeto mutuos».
Aludió al Magreb como una región prioritaria de la acción exterior española, señalando que la estabilidad y prosperidad, especialmente de Marruecos, Argelia y Túnez es determinante para España.
Don Felipe recordó las recientes visitas a España de los presidentes de Israel y Palestina, de las que dijo que permitieron a España expresar su apuesta por un acuerdo «de beneficio mutuo» sobre las cuestiones clave, «incluido el estatus de Jerusalén como capital compartida».
No hizo ninguna referencia a la crisis con Venezuela, pero sí indico que «Europa y América son, en España, vasos que se comunican» y “socios que hablan y se respetan, aunque a veces, coyunturalmente, opinen distinto».
Puede leer aquí el discurso completo del Rey en español