<span style="font-size: small;">Foto de familia de los cancilleres iberoamericanos reunidos en Guatemala./ Foto: <strong>SEGIB </strong></span> <span style="font-size: small;"><strong>The Diplomat</strong>. 09/12/2017</span> <strong><span style="font-size: medium;">Los cancilleres de los países iberoamericanos, reunidos en Guatemala, se mostraron de acuerdo en trabajar por una "Iberoamérica próspera, inclusiva y sostenible" haciendo que concuerden los propósitos de la XXVI Cumbre Iberoamericana de 2018 con la agenda universal de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS).</span></strong> <strong></strong>La secretaria general iberoamericana, Rebeca Grynspan, subrayó el compromiso de los países miembros, que el próximo año celebrarán la cumbre en Guatemala, para hacer que la región se consolide “como un espacio de entendimiento” y una sus voces a una alianza global. Grynspan dijo que ese compromiso se pone de relieve no sólo de palabra, sino también con recursos, como demuestran los fondos específicos de cooperación de Argentina y Chile, además de los que se firmarán el próximo año con Panamá y Colombia. Subrayó también Rebeca Grynspan que el desafío está en hacer que las acciones sean concretas para beneficiar a los ciudadanos, porque la retórica y la renovación de los compromisos son un valor pero no son suficientes: "Tiene que haber resultados para la gente", enfatizó. En la reunión de cancilleres, celebrada los días 6 y 7, participaron representantes de alto nivel de los 22 países que integran la Conferencia Iberoamericana, que adoptaron una declaración política en la que se plasman los principales compromisos regionales en materia de desarrollo, cooperación y otros asuntos de prioridad de la agenda internacional. En representación de España, el ministro de Asuntos Exteriores, Alfonso María Dastis, alabó "la labor impecable" de Guatemala como país anfitrión, y resaltó la cooperación iberoamericana y el cumplimiento de la Agenda 2030". Añadió que la región tiene como experiencia en este campo, la integración de generaciones y el reconocimiento del papel de la diversidad, la igualdad de género o las culturas indígenas, todo con el fin de alcanzar el "desarrollo sostenible".