Manifestación de los trabajadores en Argentina./ Foto: @EmpPubESPenARG
Eduardo González. 25/08/2017
La llegada de septiembre y el fin de la tregua veraniega traerán consigo la reanudación del conflicto que enfrenta al Gobierno con el personal laboral de las Embajadas y del resto de la estructura administrativa en el exterior, que reclaman la revisión de una retribuciones salariales congeladas desde 2009.
El pasado mes de junio, las centrales sindicales amenazaron con convocar, una vez terminado el verano, huelgas generalizadas en todas las Embajadas, después de que la última reunión de la Comisión Técnica del Personal Laboral en el Exterior (PLEX, que engloba a los sindicatos y a los departamentos afectados) concluyera sin ninguna oferta salarial por parte de la Administración General del Estado.
Las huelgas comenzaron a finales de mayo en la Embajada de España en Argentina, cuyos empleados reclamaron un aumento salarial del 25 % que compense la pérdida de poder adquisitivo por la evolución de los precios en ese país, y poco después se extendieron a la Embajada en Suecia y al Consulado de Sídney (Australia).
La huelga de Argentina fue desconvocada a mediados de junio a la espera de la reunión de la Comisión Técnica, pero ante la falta de resultados, los trabajadores decidieron en asamblea, el 29 de junio, la reanudación de los paros. La huelga de Suecia fue suspendida el 22 de junio.
Uno de los casos más notorios fue el del personal del Consulado en Sídney, que se declaró en huelga durante 35 días para reclamar la actualización de unos salarios que, desde el pasado 1 de julio, se encuentran por debajo del mínimo legal en Australia. “Si en el mes de septiembre la Administración española continúa sin actualizar nuestros salarios, nos veremos obligados a retomar la huelga”, advirtieron.
[hr style=»single»]
Argentina y Sídney amenazan con reanudar la huelga y se anuncian paros en EEUU, Finlandia, Canadá o México
[hr style=»single»]
Entretanto, los sindicatos CSIF, UGT y CCOO advirtieron en junio que, si no se avanza en las negociaciones salariales, el conflicto laboral podría extenderse en septiembre a las representaciones españolas en Estados Unidos, Canadá, Finlandia, Uruguay, Nicaragua, México o República Dominicana, entre otros, además de reanudarse los paros que fueron suspendidos antes del verano.
Según fuentes sindicales, se calcula que la Administración española en el exterior cuenta con más de 10.000 empleados cuya situación, aseguran, es de desprotección parcial o total. El Real Decreto-ley 20/2012 para garantizar la estabilidad presupuestaria y de fomento de la competitividad estableció una “única circunscripción electoral” para la representación sindical del conjunto del personal laboral en el exterior y dejó sin efecto “cuantos pactos, acuerdos o convenios hayan podido establecer condiciones distintas a las reguladas” en el propio Real Decreto.
Desde la congelación de los salarios en 2009 (en plena crisis), por citar un ejemplo significativo, la inflación acumulada en Argentina es del 178%, lo cual ha supuesto una pérdida del poder adquisitivo del 34% para los trabajadores de la Embajada. Exteriores ha argumentado en todo momento que las retribuciones son competencia exclusiva del Ministerio de Hacienda.
De acuerdo con los datos del Ministerio de Administraciones Públicas, el 77% de los trabajadores del Ministerio de Asuntos Exteriores trabajan en el exterior. En el caso de los funcionarios, el porcentaje de los que trabajan en el exterior es del 51%, mientras que en el caso del personal laboral es de nada menos que el 94%.
Según el Padrón de Españoles Residentes en el Extranjero del INE, cerca de 2,4 millones de españoles residen actualmente en el exterior, cantidad que ha aumentado en casi un millón de personas desde 2009, el mismo año en que se aprobó la congelación salarial. A la cabeza de la lista se encuentra Argentina, donde residen casi 450.000 ciudadanos españoles.
