The Diplomat in Spain

Cristina Narbona./ Foto: YouTube

The Diplomat. 22/06/2017

Giro de 180 grados del nuevo PSOE de Pedro Sánchez. La presidenta socialista, Cristina Narbona, anunció ayer un cambio de posición de su partido sobre el Tratado de Libre Comercio entre la UE y Canadá, el llamado CETA por sus siglas en inglés, y adelantó que los diputados socialistas no apoyarán este convenio internacional en la decisiva votación de dentro de una semana en el pleno del Congreso.

El PSOE votó a favor del CETA el pasado martes en la Comisión de Asuntos Exteriores del Congreso. Dicha votación se saldó con 28 votos a favor y 8 en contra (los de Podemos y ERC). El dictamen necesita aún el visto bueno del pleno de la Cámara baja y, posteriormente, del Senado.

“No lo vamos a apoyar”, indicó ayer Narbona en su cuenta de Twitter cuando un usuario le advirtió que apoyar el CETA “no es de izquierdas”. Otra usuaria, sorprendida por la respuesta de la ex ministra de Medio Ambiente, le preguntó por los motivos de ese cambio de posición que, a su juicio, era “un gran error”. La nueva presidenta socialista respondió lo siguiente: “Los acuerdos internacionales tienen que redefinirse para no concentrar más poder en las grandes corporaciones a costa de derechos”.

Narbona no indicó si el PSOE se abstendrá o votará en contra del CETA en el pleno del Congreso, una decisión que deberá consensuar ahora la nueva Ejecutiva socialista en la reunión de la próxima semana. Si el PSOE se alinea con Podemos y ERC, la votación entre partidarios y detractores del convenio euro-canadiense quedaría muy ajustada y, en la práctica, se decantaría hacia un lado u otro en función del voto que decidiesen el PNV y los catalanes del PDeCat.

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Una diputada socialista desveló hace unos días que había una «corriente interna» dentro del PSOE contraria al CETA

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En la Comisión de Asuntos Exteriores, el portavoz socialista, Ignacio Sánchez-Amor sostuvo que la posición de su partido sobre el CETA no había variado, después de que Podemos llamase a su formación a dar marcha atrás en este apoyo ahora que ha elegido un nuevo secretario general, Pedro Sánchez. El partido morado aseguró que “el capitalismo neoliberal actual es descarnado y socialmente insostenible” con iniciativas como el CETA.

Hace unos días la diputada socialista Rocío de Frutos, una de las diputadas que se mantuvo fiel a Sánchez y votó ‘no’ a Mariano Rajoy en la investidura, desveló que existía una “corriente en el partido” que no apoya este tratado y “los efectos que puede llegar a tener».

El CETA cuenta ya con el visto bueno formal de los Veintiocho y del Parlamento Europeo, pero la aplicación formal no se producirá hasta que se haya cumplido el proceso de ratificación de todos los parlamentos nacionales, algo que puede llevar años.