Ramón de Miguel./Foto: MAEC, Embajada de España en París
Eduardo González. 07/05/2017
El embajador saliente de España en Francia, Ramón de Miguel, ha unido su firma a las de otros ex ministros y viceministros europeos de Asuntos Exteriores y Asuntos Europeos para pedir a los franceses que voten al candidato socio-liberal Emmanuel Macron y rechacen a la candidata ultraderechista y nacionalista Marine Le Pen en la segunda vuelta de las elecciones presidenciales galas, que se celebra hoy.
De Miguel alcanzó la edad de jubilación el pasado 3 de mayo, por lo que estaba previsto que fuese cesado ese mismo día después de que el ministro de Asuntos Exteriores, Alfonso Dastis, hubiera optado por no prorrogar su permanencia al frente de la Embajada, a pesar del periodo de transición política que se abre en Francia. El cese de De Miguel fue anunciado oficialmente ayer.
De Miguel (quien fue secretario de Estado de Política Exterior y Asuntos Europeos entre 1996 y 2004) ha firmado junto a otros doce ex ministros y ex viceministros (los alemanes Günter Gloser, Peter Friedrich y Hans-Martin Bury, la austríaca Benita Ferrero-Waldner, los franceses Elisabeth Guigou, Claudie Haigneré, Alain Lamassoure y Noëlle Lenoir, el rumano Mircea Geoana, el británico Denis MacShane o el italiano Vicenzo Scotti) una carta abierta en la que se afirma que “Francia es país fundador y uno de los motores de la Unión Europea” y la elección del presidente, aunque “es un asunto de los franceses, concierne al conjunto de los europeos”.
[hr style=»single»]
El antiguo embajador y secretario de Estado firma una carta conjunta con otros ex responsables europeos
[hr style=»single»]
En el texto (una tribuna exclusiva publicada el 4 de mayo por EURACTIV.com y reproducida por medios franceses y europeos), los firmantes recuerdan que “uno de los dos candidatos en liza se presenta como el socio de los otros Estados miembros”, mientras que “el otro candidato anuncia su proyecto de cerrar las fronteras de Francia para separarla del resto de Europa”.
“Uno expresa su amor por su patria y el convencimiento de que el patriotismo no está reñido con la cooperación con los otros Estados europeos”, mientras que “el otro es ferozmente nacionalista y aislacionista con acentos xenófobos”, prosiguen.
Por estos y otros motivos esgrimidos en la carta abierta, “nosotros, antiguos ministros de Asuntos Exteriores y Asuntos Europeos, pedimos solemnemente a los franceses que voten a Emmanuel Macron y rechacen un nacionalismo que pretende erigir un muro entre Francia y el resto del mundo», tomado así partido por «la Francia que amamos en una Europa fuerte y solidaria”.