En los próximos meses se cumplirá el V centenario del primer contacto diplomático entre España y Rusia.
The Diplomat. 02/05/2017
Al margen del centenario de las revoluciones y sucesos en Rusia de 1917, este 2017 es un año “rico” en aniversarios bilaterales entre España y este país, en palabras del nuevo embajador español en Moscú, Ignacio Ybáñez.
En los próximos meses se cumplirá el V centenario del primer contacto diplomático documentado entre España y Rusia, con la carta del emperador Carlos I de España y V de Alemania proponiendo al gran duque de Moscovia el establecimiento de relaciones diplomáticas. Además, se cumple el 350 aniversario de la llegada a España de la primera Embajada rusa y el 40 aniversario del reestablecimiento de las relaciones diplomáticas entre España y la Unión Soviética tras el franquismo.
“Debemos ahora saber aprovechar esa buena disposición para reforzar nuestros intercambios económicos y comerciales con Rusia, para desarrollar nuestras relaciones culturales y para seguir ayudando a nuestros nacionales residentes en Rusia”, enfatizó Ybáñez en sede parlamentaria. Uno de estos contactos se producirá a finales de mayo con la visita a Moscú del ministro de Energía, Álvaro Nadal, a Moscú para presidir la Comisión Mixta Económica e Industrial.
En el terreno económico, la economía rusa es la decimotercera más grande del mundo y la española, la decimocuarta. En los últimos años el efecto acumulado de la recesión económica rusa, la devaluación del rublo frente al euro, los bajos precios del petróleo y las sanciones políticas por la invasión de Crimea han reducido drásticamente el comercio bilateral.
Las exportaciones españolas alcanzaron en 2012 la cifra récord de 2.930 millones de euros. Sin embargo, desde entonces no han parado de reducirse esta cifra hasta los 1.602 millones de euros computados en 2016, lo que representa una caída acumulada del 45,3%.
Este contexto y las medidas del Gobierno de Vladimir Putin para incentivar la localización de la producción en territorio ruso hacen que algunas empresas españolas estén replanteándose su estrategia, “pasando de un modelo puramente exportador a una implantación permanente, bien invirtiendo bien llegando a acuerdos de transferencia de tecnología con socios locales”, advirtió el embajador.
Pese a esta coyuntura empresarial, la entrada de turistas rusos en España en 2016 creció un 2,2% al superarse el millón de viajeros. Esta cifra es inferior al récord de 2013, con 1,5 millones de turistas, pero indica que el turismo ruso se está recuperando conforme Rusia sale de la crisis económica.