Sede del Ministerio en el Palacio de Santa Cruz.
The Diplomat. 01/03/2017
El Ministerio de Asuntos Exteriores recibió la pasada semana varias comunicaciones de embajadas en las que se detallan una serie de conflictos laborales que están por resolver y que han llevado al departamento de Alfonso Dastis a mostrar su preocupación en varios correos internos.
La más llamativa de estas comunicaciones, a las que ha tenido acceso The Diplomat, es el mensaje en el que se informa de que un tribunal argelino ha condenado al Consulado español en Argel a que readmita a una antigua trabajadora.
El embajador español en Argelia, Alejandro Polanco, solicitó instrucciones el pasado 16 de febrero a Exteriores ante una sentencia del tribunal de Bir Mourad Rais (Argel) -dictada el 25 de septiembre, pero recibida el pasado 22 de enero-, por la que se condena “en rebeldía” al Consulado español en Argel por haber rescindido el contrato de la trabajadora Sakina Sebbane.
Previamente, el 6 de mayo de 2015, el MAE argelino entregó una Nota Verbal a la Embajada española en la que notificaba dicho conflicto laboral. El citado tribunal exige ahora que se reintegre en el puesto de trabajo “o en un puesto similar en el grado y sueldo” a la afectada, pese a que para España el caso está cerrado desde noviembre de 2011, cuando el Tribunal Superior de Justicia de Madrid dictó una sentencia en la que se avalaba el despido.
La Embajada española en Guatemala también notificó la semana pasada a Madrid la contratación de los servicios jurídicos del bufete local Mayora & Mayora para que le represente en “los procesos laborales en que se encuentra inmersa esta Embajada”. Como consecuencia de ello, el embajador español, Alfonso Manuel Portabales, anunció la revocación de los poderes otorgados al anterior letrado.
Por último, el embajador español en Turquía, Rafael Mendívil, informó a Exteriores de la incoación de un expediente disciplinario contra el trabajador local Mehmet Çalisir, por el que se procede a la suspensión provisional de empleo y sueldo. El encargado de Asuntos Administrativos de la Embajada en Ankara entregó a Çalisir una traducción de cortesía del expediente e informó igualmente al representante sindical de UGT en la capital turca, ya que el trabajador estaba afiliado a este sindicato.