The Diplomat. 10/02/2017
El Gobierno turco relevó de sus funciones a tres diplomáticos y un militar de alto rango destinados en España tras el golpe de Estado del pasado mes de julio, según supo The Diplomat de fuentes solventes.
Dos de los diplomáticos se encontraban trabajando en Madrid, el tercero estaba adscrito al Consulado turco en Barcelona, mientras que el militar se encontraba destinado en el cuartel general de la OTAN en Bétera (Valencia). Todos ellos se ausentaron de sus puestos tras la intentona golpista y el Gobierno de Ankara desconoce su paradero y si han pedido asilo político en España o en otro país europeo.
Fuentes del Ministerio español de Asuntos Exteriores admiten que el Ejecutivo de Mariano Rajoy fue informado de estas destituciones, aunque desconocen si los tres diplomáticos y el oficial turco de alto rango se han quedado a vivir en España bajo algún tipo de protección. En todo caso, Ankara no ha formulado por el momento ninguna petición de extradición contra ellos.
El ministro turco de Exteriores, Mevlut Çavusoglu, indicó ayer en Madrid que su departamento ha tenido que prescindir del 20% de sus diplomáticos tras el golpe de Estado ya que llevaban a cabo «actividades ilegales». En algunos casos, se han recopilado pruebas contra ellos por haber «filtrado documentos secretos» a países terceros.
A día de hoy, sólo Alemania y Grecia reconocen que han recibido peticiones de asilo político por parte de militares turco. En el primer caso, alrededor de 40 uniformados turcos que estaban estacionados en bases de la OTAN en territorio germano han pedido quedarse en Alemania. El caso de Grecia fue distinto ya que a este país llegó un helicóptero con un grupo de ocho militares tras la asonada. El Tribunal Supremo heleno decidió en enero rechazar la extradición de ellos que había solicitado Ankara.