El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro./ Foto: Jumanji Solar/Flickr
Miguel Cifuentes. 08/11/2016
El Gobierno está decidido a cumplir los objetivos de déficit público, sacar adelante los Presupuestos del Estado para 2017 lo antes posible e impulsar las reformas necesarias para que la economía española crezca muy por encima del 2% . Prácticamente, garantiza ya que en 2016 el déficit será del 4,6% y el año próximo bajará al 3,1%.
A tal efecto, se propone “hacer todo lo necesario para conseguirlo, tal como se ha pactado con la Comisión Europea”, según fuentes del Ministerio de Economía. Eso supone un recorte de 5.000 millones de euros en el gasto público de este ejercicio y realizar los ajustes necesarios en el año entrante.
El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, ha comunicado por carta al comisario europeo de Economía, Pierre Moscovici, que ya se están ejecutando los recortes. En la misiva, Montoro dice al comisario que “se va a cumplir el objetivo de déficit, la ejecución presupuestaria va mejor de lo esperado y hay margen para cumplir el objetivo”. El Gobierno también está “muy determinado a sacar adelante unos Presupuestos Generales del Estado en 2017, en el plazo más breve posible. Es muy posible conseguir el necesario apoyo parlamentario, más allá del logrado en la investidura de Mariano Rajoy, con otros grupos que comparten objetivos de política económica al margen de las diferencias ideológicas”, según medios del Ministerio de Economía.
Esos apoyos vendrían de Ciudadanos, PNV, Coalición Canaria y algún otro grupo parlamentario. El Gobierno no descarta que el PSOE “apoye algunas de las medidas presupuestarias si hay contrapartidas de gasto social, que el Gobierno está dispuesto a pactar con los socialistas”, señalan en el ministerio citado. Por su parte el PSOE confía en que el Gobierno tenga apoyo sin tener que recurrir a los socialistas para aprobar los Presupuestos del Estado.
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Considera que habrá presupuestos del Estado con apoyos parlamentarios suficientes y contrapartidas de gasto social
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El titular de Economía, Luis de Guindos, confirmó ayer desde la capital comunitaria todos estos anuncias, al subrayar que es posible cumplir con Bruselas en todo lo pactado “porque la economía española sigue mostrando fortaleza, crece por encima de lo esperado y se pueden cumplir los objetivos presupuestarios, incluso con más margen.”
Sin embargo, los retos económicos del Gobierno para 2017 y años siguientes son muy exigentes. Por un lado presiona Bruselas en el equilibrio de las cuentas públicas, con amenazas de sancionar a España con la pérdida de fondos y el cobro de multas millonarias. Por lado otro los partidos políticos de la oposición y los sindicatos exigen el final de los recortes en los servicios públicos, y el aumento de gasto público en sanidad, educación y dependencia, cobertura y subsidios a los parados (4 millones de personas) y mejora de las pensiones (2,7 millones de españoles tienen pensiones por debajo de 600 euros al mes).
Los empresarios por su parte reivindican que sigan las reformas económicas y ponen el acento en dos: 1) profundizar en la reforma laboral para flexibilizar la contratación y el despido, y 2) la reforma de las pensiones, ya que el sistema de Seguridad Social tiene un déficit de 16.000 millones, que se puede agrandar hasta los 17.000 millones.
Finalmente las Comunidades Autónomas exigen al Gobierno una reforma del sistema de financiación para poder aumentar el gasto social. El Gobierno ya les ha advertido que lo que toca es lo contrario: seguir recortando para cumplir el objetivo del 3,1% que exige Bruselas para todas las Administraciones Públicas en el año 2017.
