El ministro argentino junto a Luis de Guindos./ Foto: @casamerica
Eduardo González. 01/06/2016
El ministro de Hacienda y Finanzas de Argentina, Alfonso Prat-Gay, aseguró ayer que su país ya ha dado “el giro” necesario para mejorar unas relaciones con España que han estado “muy castigadas en los últimos años” por culpa de una política basada en “combatir a quienes habían sido y deberían ser nuestros aliados”.
“Hemos dejado atrás esa etapa, y la mía es la primera de varias visitas adicionales del resto de ministros y del presidente de la nación”, declaró Prat-Gay durante un acto organizado por la agencia Efe y Casa América en la sede de esta institución en Madrid.
Según el ministro argentino, en el momento en que iba a salir hacia España para efectuar su visita oficial, el presidente Mauricio Macri le transmitió un único mensaje a los españoles: “Deciles que se apuren para invertir en Argentina”.
“Los estamos esperando, sabemos que han tenido que atravesar un desierto muy largo, pero ese giro que esperaban de los socios argentinos ya se dio, cuando pusimos fin al populismo autoritario del Gobierno anterior”, prosiguió, en referencia a las presidencias de Néstor Kirchner y Cristina Fernández.
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Luis de Guindos recuerda que España es el primer inversor de la UE y el segundo del mundo en Argentina
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“Somos países hermanos y ya saben las oportunidades que ofrece Argentina”, un país “sin conflictos étnicos ni religiosos”, con “recursos humanos tremendamente capacitados a pesar del deterioro de la educación” y que ha recuperado la estabilidad financiera que garantiza “la previsibilidad de las reglas del juego”, aseguró.
Alfonso Prat-Gay fue presentado, antes de su intervención, por Luis de Guindos, ministro de Economía y Competitividad, quien elogió el “cambio valiente” iniciado por el Gobierno argentino.
“Argentina recupera la mirada al exterior como una oportunidad y no como una amenaza” y, en este contexto, destacó, “se abren importantes posibilidades en las relaciones entre Argentina y España”. “España es, en Argentina, el primer inversor de la Unión Europea y el segundo del mundo” y quiere “seguir jugando un importante papel de impulsor de las relaciones comerciales y económicas con la Unión Europea”, concluyó.
