The Diplomat in Spain

El incidente comenzó cuando la Guardia Civil persiguió a un barco sospechoso de contrabando. 

The Diplomat. Madrid

La disputa entre España y el Reino Unido sobre la soberanía de las aguas que rodean Gibraltar ha tenido en las últimas horas un nuevo capítulo como consecuencia de la actuación del Servicio de Vigilancia Aduanera de la Guardia Civil parea tratar de detener a unos contrabandistas. La Comisión Europea instó a Madrid y Londres a “respetar las convenciones internacionales, entre ellas el Derecho marítimo”.

Los sucesos que han originado este nuevo capítulo de discrepancias tuvieron lugar el pasado domingo cuando dos embarcaciones y un helicóptero de la Guardia Civil persiguieron hasta las costas de Sandy Bay, en el Peñón, a un barco sospechoso de estar realizando tareas de contrabando. El Foreign Office reprochó a España no haber comunicado a las autoridades gibraltareñas la entrada en lo que considera aguas territoriales británicas de Gibraltar y le acusó de realizar “repetidas incursiones” en estas.

Para España no ha existido ningún incidente porque sostiene que esas aguas son españolas, ya que no fueron cedidas por el Tratado de Utrecht, y que, en consecuencia, la Guardia Civil puede navegar por ellas sin pedir autorización a nadie.

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El PSOE expresa su confianza en la actuación de la Guardia Civil

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El Gobierno contó ayer con el respaldo del PSOE, cuyo portavoz parlamentario, Antonio Hernando, dijo que su partido confía «en que las autoridades españolas, las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado y los ministerios correspondientes están actuando correctamente».

El ministro principal de Gibraltar, Fabian Picardo, apoyó la tesis de Londres y aprovechó para acusar a las autoridades españolas de crear una polémica sobre el Peñón «todos los agostos» para eclipsar en los medios de comunicación «historias de corrupción en el Gobierno» y en «otras partes del sistema político» español.

Desde el PP, el diputado y alcalde de Algeciras, José Ignacio Landaluce, señaló que lo que debería criticarse es por qué los narcotraficantes van a «resguardarse» a Gibraltar cuando están siendo perseguidos y agregó que «lo que tendría que haber es más colaboración por parte del gobierno de Gibraltar».

Por su parte, la portavoz de la Comisión Europea, Natasha Bertaud, al ser preguntada en Bruselas por el contencioso, instó  a Madrid y Londres a respetar las convenciones internacionales, entre ellas el Derecho Marítimo.

La portavoz añadió que la Comisión Europea está «al tanto» de la queja británica y está «siguiendo las informaciones», pero considera el caso «un asunto bilateral entre España y el Reino Unido.