El exministro de Educación, José Ignacio Wert
The Diplomat. Madrid
El PP aceptó ayer que el exministro de Educación, Cultura y Deporte, José Ignacio Wert, explique en el Congreso de los Diputados su reciente nombramiento como embajador ante la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), pero no dijo cuándo.
Dicha comparecencia se hará “en período ordinario de sesiones”, es decir en algún momento a partir de la próxima semana, aunque no está muy lejos la fecha de la disolución de las Cortes, un paso que Mariano Rajoy podría dar a mediados de octubre.
Fuentes socialistas indicaron a The Diplomat que, en principio, quedaría tiempo para una o dos sesiones en la Comisión de Exteriores de la Cámara baja, que es donde Wert se sometería a las preguntas de los diputados, ya que este órgano es el que está habilitado para recibir a los nuevos embajadores gracias a la ley de Acción Exterior que se aprobó hace un año por iniciativa del actual Gobierno.
El PSOE había pedido el 2 de agosto a la Diputación Permanente, el órgano que sustituye al Pleno de la Cámara en periodo no ordinario de sesiones, la comparecencia urgente del ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García Margallo, para que diera cuenta de las razones del polémico nombramiento, así como la del propio Wert, con el fin de que este último enumerase sus tareas al frente de la Embajada española de la OCDE en París.
Las dos peticiones tuvieron el apoyo de la Izquierda Plural, CDC, Uniò y UPyD, pero fueron desestimadas en la Diputación Permanente de ayer con los votos del PP, que ostenta la mayoría absoluta. A cambio, la portavoz del PP para este asunto, Beatriz Rodríguez Salmones, aceptó que Wert vaya en “período ordinario de sesiones”, aunque queda en el aire la fecha. Por lo pronto, el Gobierno aún no ha notificado al Parlamento el nombramiento de Wert, con lo que no se puede solicitar su comparecencia, subrayaron las citadas fuentes socialistas.
El PSOE lamentó que se premie a Wert «con un retiro dorado a París como si fuera un regalo de bodas»
Rodríguez-Salmones hizo hincapié en que el cargo de jefe de la delegación permanente de España ante la OCDE no es ningún «chollo», ni un «retiro dorado», y que su predecesor, Ricardo Díez-Hochleitner, «se ha matado trabajando» durante que estuvo destinado en París.
Por el contrario, desde el PSOE se criticó “el regalo de bodas” que le ha hecho Rajoy a Wert tras haber contraído matrimonio este último en julio con la que fuera su número dos en el ministerio, Monsterrat Gomendio, quien en mayo logró un puesto precisamente en la OCDE. «Compensan al peor de sus ministros con un retiro dorado a París como si fuera un regalo de bodas», se lamentó la socialista Isabel Rodríguez.