Una de las bombas perdidas en Palomares en 1966.
The Diplomat. Madrid
La organización Ecologistas en Acción presentó la pasada semana una denuncia ante el Tribunal Supremo en la que acusa de inacción al Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (Ciemat) y al Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) por no haber avanzado en la limpieza de Palomares, donde han permitido -dice- «un cementerio nuclear al aire libre» durante años.
Las negociaciones bilaterales entre España y Estados Unidos, este último encargado de la limpieza y la retirada del suelo contaminado en la localidad almeriense, en torno al trabajo de recuperación de la zona llevan paralizadas desde 2012, cuando Hillary Clinton abandonó el Departamento de Estado desde el que estuvo cerca de llegar a un acuerdo con el jefe de la diplomacia española, José Manuel García-Margallo.
La denuncia, interpuesta por Ecologistas en Acción ante la Fiscalía del Tribunal Supremo, va dirigida al Centro de Investigaciones Energéticas, Medioambientales y Tecnológicas (Ciemat) y contra el Consejo de Seguridad Nuclear (CSN) por no haber hecho nada con la radiactividad de Palomares y haber permitido durante 49 años un «cementerio nuclear al aire libre».
El grupo ecologista pide al CSN que explique por qué el plan de rehabilitación está parado desde hace 5 años
En el texto se solicita que declare el presidente del CSN, Fernando Martí Scharfhausen, para explicar por qué el organismo que preside «no avisó hace 50 años del peligro que supone remover tierras contaminadas» y por qué el plan de rehabilitación de la zona está paralizado desde hace un lustro.
En 1966, un bombardero y un avión cisterna de las Fuerzas Armadas estadounidenses colisionaron durante una maniobra rutinaria y las cuatro bombas termonucleares que llevaba el primero cayeron sobre Palomares, contaminando la zona con plutonio, principalmente isótopos de plutonio-239, con un tiempo de vida de más de 24.000 años. Desde entonces, España ha intentado llegar a un acuerdo con Estados Unidos para que cubra los gastos de la limpieza de la zona y de la eliminación de tierras en la región más contaminada del país, pero no han alcanzado ningún acuerdo.