The Diplomat. Madrid.
El Tribunal Supremo niega en una sentencia hecha pública ayer, que el archivo del «caso Falung Gong», sobre la persecución a los seguidores de este movimiento religioso por parte de las autoridades chinas, se deba a una injerencia de este país en los asuntos de España. Es una de las principales conclusiones de la misma en la que el alto tribunal rechaza los recursos contra el archivo del caso.
La sentencia recuerda “la supuesta protesta diplomática del Gobierno chino” porque consideraba que “la actuación española incidía en sus asuntos internos” y añade que “corresponde al Parlamento español adoptar la decisión procedente desde la perspectiva legal a la vista de la protesta”. El caso relativo a Falung Gong y el vinculado al Tibet fueron investigados en la Audiencia Nacional y archivados tras la reforma de 2014 que limitó el alcance de la jurisdicción universal.