Albert Rivera./ Foto: Ciudadanos.
Miguel Cifuentes. Madrid
El partido que lidera Albert Rivera, Ciudadanos, está ganando una insólita relevancia a la vista de sus grandes expectativas electorales. Los poderes económicos han hecho llegar mensajes a sus ideólogos económicos, Luis Garicano y Manuel Conthe, para mantener una relación fluida.
Ciudadanos comienza a ser cortejado por el Ibex 35, el selecto grupo de empresas de la Bolsa española, el que más poder e influencia tiene en la economía, según informan a The Diplomat fuentes de ese partido.
Grandes empresas del Ibex ya les han dejado caer que su programa “es sensato y razonable, muy aceptable en muchos puntos aunque hay cosas que no terminan de gustar”. A los grandes empresarios, por ejemplo, no les gustan ocurrencias como el contrato laboral único, las subvenciones públicas a salarios bajos o la idea de dejar de invertir en el AVE y dedicar ese dinero a I+D.
Tampoco les termina de convencer el programa fiscal, “poco pensado, políticamente incorrecto, y excesivamente recaudador, con ocurrencias como la simplificación de los tipos a solo tres y la subida del IVA reducido del 4% que pagan bienes de primera necesidad”.
Con todo, el IBEX considera que tanto Garicano como Conthe son gente solvente técnica y profesionalmente. El primero es profesor de la London School of Economics y el segundo ha sido secretario de estado de Economía y presidente de la CNMV (Comisión Nacional del Mercado de Valores), lo que les da credibilidad, al menos de entrada. La duda entre este selecto grupo de empresas es si “Rivera sigue las propuestas económicas que le hacen Conthe y Garicano o está todavía en fase de ansiedad por captar votos, y eso le lleva a hacer propuestas populistas por su cuenta y riesgo, que les restan credibilidad política”.
Pese al interés por Ciudadanos, se observan errores en su programa fiscal
El “error fiscal” de Ciudadanos, según le aseguran a The Diplomat, se debe a haber encargado el programa fiscal a un inspector de Hacienda, ex dirigente del sindicato de Inspectores de Hacienda, que militó o estuvo próximo al PP, luego a UPyD, y que ahora milita en Ciudadanos. Este inspector, técnica y profesionalmente muy solvente, tiene la visión recaudatoria de todos los inspectores. Propone fórmulas fiscales modernas e imaginativas, simplificar drásticamente el sistema fiscal español, dejar pocos tipos de IRPF y de IVA, y limpiar el Impuesto de Sociedades lleno de subvenciones, desgravaciones, exenciones, incentivos temporales, parciales, coyunturales, un auténtico laberinto que al final fomenta la injusticia fiscal y los privilegios y favorece sólo a quien tiene buenos asesores fiscales.
Simplificar con equidad y eficacia recaudatoria, como propone Ciudadanos, es una gran idea, pero es solo aplicable en un país con educación fiscal muy asentada, con poco o ningún fraude, y con una coyuntura económica mejor que la que tiene hoy España.
En el partido de Rivera aseguran que no se lo pondrán fácil al PP para gobernar
Pero en todo caso, errores de programa aparte, lógicos en un partido nuevo y emergente, Ciudadanos se ha convertido, a tenor de lo que dicen las últimas encuestas , con un 13,6 % de intención de voto, en la llave para gobernar en varias comunidades autónomas como Madrid y Valencia, y en ayuntamientos tan importantes como Madrid, Sevilla o Valencia.
“Darle al PP gobiernos autonómicos o municipales sin garantías y cautelas sería suicida, tiene un coste que nuestro electorado no aceptaría fácilmente. Nuestros votantes nos ven como un partido limpio, centrado y sensato. Pactar con el PP y PSOE, con un pasado de corrupción y escándalos en Madrid y Valencia, o en Andalucía, no es nada fácil para nosotros. Facilitaremos la gobernabilidad y estabilidad pero no haremos nada que nos comprometa hasta las próximas elecciones generales de final de este año”.
Es el aliado natural del PP, por su ideología liberal de centro o de centro izquierda, pero no va a facilitar las cosas al PP, ni al PSOE, aunque los dos pueden necesitarle para gobernar con toda probabilidad en comunidades y ayuntamientos de toda España.
La duda de Rivera, según dicen en Ciudadanos a The Diplomat, “es si usar tactismo para alcanzar poder ahora en muchas comunidades y municipios o apostar a largo plazo por hacer un partido serio, con programa sólido y exigente para la regeneración democrática de España.” En esa duda vive o sufre Rivera. Una duda de la que saldrá, a la fuerza, el 25 de mayo.