The Diplomat. Madrid
El grupo terrorista DAESH, autodenominado Estado Islámico, reivindicó ayer el atentado perpetrado en la medianoche del lunes al martes contra la Embajada española en Trípoli. El atentado, perpetrado con una «bomba casera», provocó unos daños materiales «muy limitados» en el muro exterior de la Embajada, según explicó el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García-Margallo. En la representación diplomática sólo había dos guardias de seguridad libios que no resultaron heridos. España evacuó a finales de julio del pasado año al embajador y al resto del personal acreditado en Libia por la falta de seguridad en el país.