The Diplomat in Spain

Participantes en el proyecto «Vivir 100 años»./ Foto: J.G.

Julio García. Madrid

El aumento de la esperanza de vida en la población mundial plantea nuevos retos a los arquitectos en dar soluciones en la ciudades con personas cada vez más longevas. Este es el objetivo del proyecto “Vivir 100 años. Longevidad y ciudad futura” que el ICEX España Exportaciones e Inversiones, la Escuela Técnica Superior de Arquitectura de Madrid y la Universidad de Tokio presentaron la pasada semana en el madrileño espacio cultural Matadero.

El consejero delegado del ICEX, Francisco Garzón, explicó a The Diplomat que esta iniciativa busca la conexión entre el mundo académico de la arquitectura y el sector empresarial, con proyectos que adaptan nuevos productos y nuevos servicios a la nueva realidad demográfica.

“Vivir 100 años” incluye doce proyectos que abordan diversos aspectos como la movilidad en los aeropuertos para personas mayores o discapacitados, los nuevos materiales de construcción, un nuevo concepto del baño o la utilización de nuevas aplicaciones para la transmisión de información a turistas.

Durante la presentación, Blanca Lleó, directora de “Vivir 100 años”, aseguró que los arquitectos españoles también han sufrido la crisis económica y muchos se han tenido que marchar fuera del país. Esta iniciativa, que intenta adaptar la arquitectura a ciudades con poblaciones cada vez más envejecidas, ha dado a este colectivo profesional nuevas oportunidades para establecer contacto con la sociedad y con el tejido empresarial y la industria.

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México, Perú, China , Rusia o Turquía, países atractivos para los arquitectos españoles

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Por su parte, el profesor de la Universidad de Tokio, Manabu Chiba, presentó su proyecto de nuevo estilo de vida en la Bahía de la capital de Japón, en la que se han buscado soluciones para la población de edad más avanzada en el ámbito del transporte, el ocio, el deporte y el alojamiento, en convivencia con las zonas de trabajo.

Finalmente, Garzón comentó a The Diplomat que los arquitectos españoles están muy bien valorados en cualquier parte del mundo y añadió que como consecuencia de la crisis del sector, buscan nuevos horizontes en países con grandes perspectivas de crecimiento arquitectónico como México, Perú, China, Rusia o Turquía.