El embajador Máximo Cajal, fallecido en 2014, fue uno de los tres únicos supervivientes de la matanza./ Foto: JFL/La Razón.
Alberto Rubio. Madrid
El Gobierno español mostró ayer su satisfacción por la condena, dada a conocer este lunes, al único encausado por el asalto a la Embajada española en Guatemala. En el ataque, perpetrado el 31 de enero de 1980, murieron 37 personas, incluidos 7 funcionarios de la propia representación. Sólo sobrevivieron tres.
El Ministerio de Asuntos Exteriores español señala, en un comunicado, que “aquellos lamentables hechos constituyeron una flagrante violación por parte de agentes del Estado de Guatemala de la inmunidad diplomática de la Embajada de España” y felicita a la Justicia guatemalteca porque, 35 años después, “haya juzgado estos hechos de acuerdo a las leyes y con el respeto al debido proceso”.
Además, considera que “este fallo unánime es un importante paso que contribuye significativamente a dignificar la memoria de las víctimas y de sus familiares”.
El único procesado, y condenado, es el entonces jefe del comando de Policía que asaltó la Embajada, Pedro García Arredondo. De sus jefes inmediatos sólo vive Donaldo Álvarez Ruiz, ministro de Gobernación, que es prófugo de la justicia internacional. Murieron impunes el ex presidente Romeo Lucas (1978-1982); el ex director general de la Policía y jefe inmediato de García Arredondo, Germán Chupina Barahona, y el jefe del Cuerpo de Detectives, Manuel de Jesús Valiente Téllez.
El Gobierno de Pérez Molina «reitera sus condolencias por las vidas humanas de ilustres españoles y guatemaltecos»
El Tribunal de Mayor Riesgo “B” dio a conocer su sentencia de 90 años de prisión para Arredondo este lunes, en una sesión en la que estuvo presente el actual embajador de España en Guatemala, Manuel Lejarreta.
Por su parte, el Gobierno guatemalteco también hizo público ayer un comunicado en el que “lamenta los sucesos acaecidos durante la época del conflicto armado interno en el contexto de la Guerra Fría, y reitera sus condolencias por las vidas humanas de ilustres españoles y guatemaltecos perdidas en la quema de la Embajada de España en Guatemala”.
El Ejecutivo del presidente Otto Pérez Molina -que en marzo recibirá la visita del presidente del Gobierno español, Mariano Rajoy- reitera “que estas situaciones no pueden repetirse» y hace un llamamiento “a la reconciliación nacional, que contribuya a continuar con el desarrollo nacional y el fortalecimiento de las relaciones internacionales del país”.