The Diplomat in Spain

Responsables de ambas compañías tras la firma del acuerdo./ Foto: Navantia

Julio García. Madrid

La compañía española Iberdrola firmó ayer con el astillero público Navantia un acuerdo para la construcción de la subestación eléctrica del parque eólico marino Wikinger (Alemania), por un importe total de 160 millones de euros. Los trabajos darán empleo durante más de 640.000 horas a entre 600 y 700 trabajadores en los astilleros de Puerto Real (Cádiz) y Fene (La Coruña).

El contrato incluye la construcción de dos módulos y su estructura soporte (Jacket) en el astillero de Puerto Real y el conexionado final (Hook-up) en el Mar Báltico. Además, Navantia y la compañía Windar firmaron también con Iberdrola el contrato para la construcción y descarga (Load-out) de 29 estructuras tipo Jackets y 116 Piles (pilotes de anclaje) en el astillero de Fene y en las instalaciones de Windar en Avilés.

Iberdrola destacó que se trata de uno de los mayores contratos que ha adjudicado hasta la fecha a una empresa española en el sector de las energías renovables y representa la entrada de Navantia en un mercado estratégico, como es el de la eólica offshore.

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El astillero podría participar en el futuro en otros proyectos de la eléctrica

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Esta adjudicación, que tiene fecha de finalización en 2016, podría propiciar que Navantia participe, en un futuro, en la construcción de nuevos parques eólicos marinos que Iberdrola promueve en otros países de Europa.

Por su parte, Navantia subrayó que esta  firma se produce como continuación a la decisión y comunicación de Iberdrola para que sus astilleros de Puerto Real y Fene sean proveedores preferentes, y para su participación en el proyecto alemán.

El parque de Wikinger, primero de una empresa española en ese país, dispondrá de 350 megavatios (MW) de potencia y requerirá una inversión de cerca de 1.400 millones de euros. Esta iniciativa renovable de Iberdrola, ubicada en aguas del mar Báltico, incluye la instalación de 70 aerogeneradores de 5 MW de potencia unitaria y una subestación marina en un área de unos 34 kilómetros cuadrados, todo ello en una zona con profundidades de entre 37 y 43 metros.