Barreiro, Sahuquillo, y Rodríguez y Cascante en la presentación del informe./ Foto: Alternativas
Eduardo González. Madrid
La crisis económica que afecta a España desde 2008 ha impactado de forma notable en la Ayuda Oficial al Desarrollo española, que si ya en 2012 apenas alcanzaba al 0,16 por ciento del Producto Interior Bruto, desde entonces ha caído un 22 por ciento en los Presupuestos Generales del Estado de 2014.
En el último informe de la organización no gubernamental Intermón Oxfam sobre la realidad de la ayuda oficial al desarrollo, hecho público en marzo de 2014, España era en 2012 el país que más había reducido porcentualmente sus contribuciones al Comité de Ayuda al Desarrollo (CAD) de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), con una caída del 70 por ciento, a gran distancia del penúltimo, Grecia (53 por ciento), y el antepenúltimo, Islandia (46 por ciento).
Asimismo, los 1.815 millones de euros para ayuda al desarrollo aprobados en los Presupuestos Generales del Estado para 2014 son un 22 por ciento inferiores a los de 2012, según Kattya Cascante, coordinadora del panel Cooperación al Desarrollo de la Fundación Alternativas y una de las autoras del informe El impacto de la crisis sobre el tejido social solidario de España: efectos y reacción de las ONGD frente a la crisis, presentado la semana pasada en Madrid y elaborado por la Fundación Alternativas en colaboración con la Fundación de Iniciativas para la Paz (Fundipax).
«Además de la disminución de los fondos y del alejamiento de los compromisos en materia de ayuda al desarrollo», la crisis económica ha propiciado «un desajuste cada vez mayor entre la AOD que presupuestan las administraciones y la que es realmente ejecutada», advierte el informe. Por ejemplo, en 2012, el desfase entre lo presupuestado y lo ejecutado «alcanzó la cifra récord del menos 32 por ciento», ya que se habían presupuestado 2.336 millones de euros en el Plan Anual de Cooperación Internacional (PACI) y se ejecutaron realmente 1.586 millones de euros. Antes de 2010, esta brecha rara vez superaba el 10 por ciento.
Pese a los recortes, la sociedad confía en las ONGD y las apoya a través del IRPF
«De figurar como séptimo mayor donante antes de desatarse la crisis, España ha erosionado su tejido social solidario a base de recortes y reformas legislativas», entre las que destacan las leyes de Subvenciones a ONGD, Seguridad Ciudadana, Transparencia y Educación, denuncian las autoras del documento.
«Se justifican los recortes para facilitar la recuperación económica de España, como si el ahorrarse un presupuesto tan menor (un 0,5 por ciento del PIB nacional en su momento más alto) pudiera implicar tal cosa”, lamentó Erika Rodríguez, coautora del informe y coordinadora del panel América Latina en la Fundación Alternativas.