The Diplomat in Spain

Un vehículo como el de la ilustración explorará la superficie de Marte.

Luis Ayllón. Madrid

Un proyecto español ha sido seleccionado entre las 58 propuestas presentadas para formar parte de la nueva misión “Mars Rover 2020” de la NASA en Marte, según la Embajada estadounidense en Madrid. Se trata de una unidad que medirá el clima marciano y que ha sido desarrollada de manera principal por el investigador José Antonio Rodríguez Manfredi, del Centro de Astrobiología, Instituto Nacional de Técnica Aeroespacial (INTA) de Madrid.

El pasado 31 de julio, la NASA dio a conocer los instrumentos seleccionados para viajar a bordo de su nuevo vehículo de exploración a Marte. Entre ellos se encuentra el Mars Envirnonmental Dynamic Analyzer (MEDA), un conjunto de sensores que proporcionarán mediciones de la temperatura, velocidad y dirección del viento, presión, humedad relativa y el tamaño y la forma de polvo del Planeta Rojo.

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El sistema que medirá el clima marciano es obra del investigador José Antonio Rodríguez Manfredi

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El MEDA será diseñado y construido en España, y, según la Embajada, la incorporación de la tecnología española en los viajes de la NASA a Marte es una nueva una muestra tangible de la fuerza de más de 50 años de cooperación espacial entre Estados Unidos y España, una relación que ha estado presente en casi todas las misiones en el espacio exterior llevadas a cabo por la NASA.

La elección del proyecto que pilota Rodríguez Manfredi cobra un especial valor, ya que las propuestas recibidas por la NASA para “cargar” el Rover fueron el doble del número habitual presentado para las competiciones de instrumentos en el pasado. Este es un indicador del extraordinario interés que la comunidad científica internacional ha demostrado sobre la exploración de Marte. Las propuestas seleccionadas tienen un valor total de aproximadamente 130 millones de dólares para el desarrollo de los instrumentos.

La Misión Marte 2020 se basará en el diseño de la anterior y exitosa de la nave Curiosity, que aterrizó hace casi dos años en la superficie marciana y que actualmente continua operando en el Planta Rojo. El nuevo Rover llevará sistemas más sofisticados, hardware actualizado y nuevos instrumentos para realizar evaluaciones geológicas del lugar del aterrizaje, determinar la habitabilidad potencial del medio ambiente, y directamente buscar signos de antigua vida marciana.